Aunque el impacto de las subas es importante en el bolsillo de los argentinos, aún falta un porcentaje importante por aplicar para normalizar los precios y que se pague lo que corresponde por los servicios públicos. De acuerdo a un informe del columnista de MDZ Radio Carlos Burgueño en Ámbito Financiero, el excel de Aranguren indica que el ajuste general en las tarifas de los servicios se ubica en el primer cuatrimestre del año entre un 70% y un 75% del costo al público de la luz, el gas y el agua.  Esto significa que dependiendo del servicio, aún resta un ajuste 25 y 30%, pero dependiendo del servicio y la zona del país. En ese sentido, en el caso de la luz, Mendoza y Córdoba estarían estarían a punto de equilibrio, mientras aún restaría un largo trecho de ajuste en Capital Federal y el Gran Buenos Aires.  En el gas la situación es otra, porque mientras la Patagonia y el NOA estarían cerca del porcentaje final, el resto aún debería soportar un tiempo más de aumentos. En ese cálculo aún deben sumarse los ajustes por inflación acumulados en cada momento de calcular las alzas, con lo cual. En principio, de acuerdo a las proyecciones del IPC para este año y el próximo, habría que sumarles entre 30% y 35% más.  Con esos números, si Macri quisiera llegar a 2019 con las tarifas de servicios públicos en equilibrio, aún deberían subir entre 50% y 60% hasta diciembre del próximo año.   (Fuente: MDZ)