Roger Federer hace gala de sus reflejos en cada partido de tenis, y esta semana le sirvieron para mucho más cuando quiso agarrar una langosta para una producción de fotos y tuvo que reaccionar rápido para que el animal no lo lastimara. Federer, de 37 años, viajó a Australia para promocionar la Copa Hopman y los organizadores del torneo lo invitaron a comer al restaurante Lobster Shack, a las afueras de Perth, donde el tenista se llevó un susto con la mascota local, informó el sitio ámbito.com. El tenista reunió coraje para un segundo acercamiento a la langosta y eventualmente logró agarrarla sin peligro de terminar lesionado.