Antonia Macri aun no comienza la escuela primaria pero ya posee una plantación de pinos valuada en $2,2 millones, ubicada en la provincia de Misiones que promete ser una "inversión a futuro". Según fuentes allegadas al presidente, este quiso ser equitativo con su hija menor, debido a que en el pasado les transfirió importantes bienes a sus hijos mayores.  Mauricio Macri cedió en 2009 la propiedad de las acciones, pero se quedó con las ganancias que repartía la compañía familiar. Recién en 2012 entregó también el usufructo a sus hijos (todos ya mayores de edad), por lo tanto Agustina, Gimena y Francisco Macri hoy son dueños de parte de la nave insignia de la familia Macri. En cuanto al pinar, propiedad de Antonia Macri ahora, fuentes oficiales afirmaron:"fue una decisión familiar y es una inversión a futuro, los árboles crecerán y ella también", explicaron en Casa Rosada sobre la decisión presidencial. "El pinar se compra cuando son ramitas y se vende cuando la madera está madura. Es una inversión a 20 años o 30 años".