Juan Ignacio Maggi, tiene 54 años, nació en la provincia de Córdoba, al año de vida tuvo poliomielitis. Esta enfermedad ataca las neuronas motoras, en este caso Juan perdió la movilidad en las piernas, pero a pesar de padecer esta patología, nunca renuncio a sus ganas de vivir. Medio siglo se manejó con bastones canadienses y silla de ruedas. Hace menos de 4 años fue uno de los primeros en el mundo en colocarse un sistema biónico (C-brace) en sus piernas. En su lucha incansable con la polio, la vida le puso otro obstaculo en el camino. Antes de cumplir sus 40 sufrió un paro cardiaco producto de una vida sedentaria, consumo de  comida chatarra y  de ser fumador activo. A partir de ese momento la vida de Juan hizo un click. En el afán de buscar cómo salir de esa situación, apareció el deporte y a partir de ahí encontró su faceta desconocida, el amor por las actividades deportivas adaptadas. Después de superar el infarto sufrido a los 37 años, Jean como, lo apodan sus amigos, se empezó a poner objetivos deportivos en su vida. El primero de ellos fue una maratón realizada con una bicicleta de manos en Nueva York, a partir de ahí no paró de proponerse metas en el deporte adaptado. Hace dos años le propusieron filmar un documental en Corona del Inca (paso de 5400 mts de altura ubicado en La Rioja), pero Maggi empezó a buscar un desafío mayor que se pueda hacer con una bicicleta adaptada. Es ahí que apareció la cordillera del Himalaya que está a 5600 mts de altura. Habló con los productores encargados del documental  y propuso hacerlo, después de ahí partieron  para filmar Challenge Himalaya, que cuenta un poco su historia de vida hasta llegar a ese paso. En una entrevista exclusiva con DAME NOTICIAS, Juan Ignacio Maggi habló del deporte adaptado y mucho más: ¿Qué te motivo a practicar deporte adaptado? Las cosas se van dando, creo que se me alinearon los astros. En definitiva, un montón de sucesos te pasan en el mismo momento, y a partir de eso  hace que uno  tome determinadas decisiones .El deporte en mi vida apareció justo cuando debía aparecer,  en otro momento no lo hubiese agarrado. Mi discapacidad y el infarto, me hicieron sentir la necesidad de tener un cambio de vida, de hábito para poder salir adelante. Hasta el momento desconocía que el deporte adaptado se podía practicar. Hoy está todo más difundido, pero hace 15 años cuando padecí el paro cardiaco el deporte adaptado casi no tenía difusión.  Después de subir el Himalaya. ¿Cuál es tu próximo objetivo? Estoy entrenando para cruzar la cordillera de los andes a caballo, ahora en lo deportivo sigo con la bicicleta pero un poco más recreativa. Estoy muy enganchado con equitación, a principio de año llegue al Valle de las Lágrimas, lugar donde cayó el avión de los jugadores de rugby uruguayos. La idea es cruzar la cordillera del lado Argentino, todavía no defino la fecha pero sería entre diciembre y febrero del 2018. ¿Cómo te preparas físicamente para tus próximos desafíos? La preparación física depende mucho de lo que quieras hacer. Si lo ves desde el punto de vista recreativo, la exigencia del entrenamiento es menor, pero si querés hacer algo más de alto rendimiento, como lo que hice yo, la exigencia es mucha más alta.  La única diferencia muy marcada con respecto al deporte convencional, es que por ahí en el deporte adaptado están mucho más presente las lesiones. Entonces hay que ser un poco más cuidadoso a la hora de romper algún tendón o ligamento pero las exigencias son exactamente las mismas. ¿Tenes un equipo de trabajo especial? Mi equipo consta de nutricionista, preparador físico, fisioterapeuta y profesor de yoga. Dependiendo el deporte que estoy practicando, por ejemplo ahora que estoy metido con equitación, tengo a mi profe de equitación. Tengo un equipo de profesionales y con todos los controles que requiere el alto rendimiento. ¿Como ves el deporte adaptado en el país? El deporte adaptado ha evolucionado muchísimo, creo que ustedes los medios de comunicación son vitales para el desarrollo de un deporte. Transmiten conocimiento y las posibilidades que tiene el deporte adaptado. El mismo debe tener las mismas alternativas que el deporte convencional. Creo que la difusión es muy importante desde ese punto de vista. Cuando algo tiene mucha difusión genera interés por parte de la sociedad y cuando una sociedad está interesada se consiguen los recursos. Por suerte a mí, con el documental del Himalaya, algunos sponsors me acompañaron y eso hace que el deporte se desarrolle un poco más. Cuando distintas empresas invierten recursos o ya generas una entrada a través del deporte adaptado hay más desarrollo. Que mensaje le dejas a las personas que sufren alguna discapacidad y no conocen la posibilidad de practicar deporte. Yo lo que digo es que el deporte es mágico, es súper sanador, sana el cuerpo y agranda la mente. No hace falta cruzar el Himalaya para hacer deporte, hay muchísimas alternativas para practicar deporte adaptado, donde uno puede desarrollarse. Tampoco hace falta hacer deporte en alguna disciplina en particular,  sino que es muy bueno generar el movimiento. Hay distintos elementos como bicicletas de mano, como la que tengo yo , que no requiere de tanta tecnología como con la que subí al Himalaya , existe un modelo básico que reemplaza a esa primera bicicleta que todos tuvimos. Considero que està bueno generar el movimiento, porque por ahí la misma discapacidad nos lleva a la zona de confort y eso es lo que nos achata. Juan Ignacio Maggi estará en la provincia de San Juan el 21, 22 y 23 de septiembre, dando una charla organizada por la fundación Junior Achievement que convoca a más de  400 personas.