Sin dudas, que la vocación en el trabajo como maestro es indispensable. La enseñanza  a los chicos no solamente en lo didáctico, sino también en los valores y en la formación como personas es uno de los procesos claves que los docentes saben como nadie. En la conmemoración de otro día del maestro, la directora de la Escuela Primaria Mary O. Graham Luz Rodríguez habló con DAME NOTICIAS sobre esta apasionante labor. Además, se refiere al gran sentimiento que surge al contactarse con los niños, pero a la vez, con aquellos ex alumnos que hoy en día son mujeres y hombres de bien. ¿Por qué eligió la docencia como fuente de trabajo? “De muy chica elegí serlo, y siempre estuve vinculada a procesos educativos. Por ejemplo, cuando iba al secundario,  le enseñaba a una vecina, y eso me sirvió para saber que era mi vocación. Aunque incursioné en otras actividades, pero siempre fue una pasión en mí poder compartir lo que uno adquiere a la hora de enseñar”. ¿Qué es lo que más aprendió en sus años como maestra? “Creo que un docente debe ser consciente del rol que está cumpliendo.  Por eso debe aprender permanentemente. Esto es un proceso constante, hay que saber adaptarse a los cambios porque todas las personas son perceptibles. Soy una convencida en que se debe aprender diferentes metodologías y con ello, poder crear un clima donde se desarrollen las diferentes capacidades de los niños, porque cada chico tiene condiciones distintas y el docente tiene que sensibilizarse con ellos”. Siempre hay un momento que marca la vida de un maestro. ¿Cuál fue ese hecho qué siempre recordarás? “Hoy siento mucho orgullo que ex alumnos míos me busquen en las redes sociales, o que los encuentre en la calle y abrazarme con ellos, contar anécdotas. Es muy lindo saber que uno los vio crecer y ahora son mujeres y hombres que estudian o trabajan. Son pequeños logros que uno tiene en su trabajo y sobre todo, ver que colaboró con un granito de arena en la vida de esas personas”. Con todas sus experiencias vividas. ¿Qué es ser maestra? “Ser maestra es ser ejemplo de entrega, compromiso y sobre todo, de lograr que cada alumnos logre superarse. Cuando obtengo esas metas, me pongo totalmente orgullosa por los chicos que son y fueron mis alumnos”.