Viernes 22.11.2024
Actualizado hace 10min.

La amenaza que supone la primavera para los alérgicos

En esta estación los árboles desprenden polen, sobre todo el plátano.

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Esta época primaveral tan esperada, que suele verse en todos lados como la mejor estación del año, es para muchos alérgicos una verdadera amenaza.

La polinización de árboles como el álamo, arce, fresno, tilo y el tan odiado plátano ocurre en estos meses, más precisamente durante agosto, septiembre y mediados de octubre.

Sus pólenes son liberados al medio ambiente, y esas sustancias en suspensión producen las famosas reacciones alérgicas estacionales, que afectan a un alto porcentaje de la población. Las mismas ocurren cuando la persona tiene una carga genética familiar, que puede provenir del padre, de la madre o de ambos, y es se suma la lluvia de pólenes.

Aparece entonces la rinitis estacional o polínica cuyas manifestaciones son estornudos a repetición, picor de nariz y de ojos y taponamiento o congestión nasal. En aquellas personas que además son asmáticas pueden aparecer crisis de broncoespasmos.

La alergia es una reacción inflamatoria exagerada del sistema de defensa del organismo ante diferentes agentes externos, conocidos con el nombre de alérgenos. En este caso en particular los pólenes.

Las consultas están aumentando de manera exponencial y el protagonista es el plátano. Por ello, comienza un debate acerca de si se debe eliminar o no. Se trata de un árbol longevo, alto, de hasta 40 metros que tiene una copa redonda, ramas retorcidas y ramillas colgantes y sirve de pulmón del planeta.

Además, es un árbol ornamental que da mucha sombra y puede verse en paseos públicos, plazas y bulevares, por lo que son muy cuidados. Pero sus pólenes producen mucha sintomatología en pacientes susceptibles, a lo que se le debe agregar la presencia de viento, encargado de dispersarlo.

Si la persona sabe que es alérgica, ya se pueden tomar medidas antes de la aparición de la polinización, es decir, realizar un tratamiento preventivo y evitar los síntomas y malestares, que son molestos pero transitorios. Se recomienda a aquellas personas que tienen alergia a los pólenes que eviten en lo posible desarrollar actividades al aire libre, dormir con las ventanas cerradas y, si el cuarto da a la calle, durante este período mudarse a otro.

Es importante la consulta al especialista cuando los síntomas son reiterados y la persona nota entorpecimiento en su calidad de vida. Si nota fastidio y con el correr de los días mucho malhumor, el paciente está irascible.

Es el especialista quien se encargará de indicar la medicación precisa, de enseñar las medidas de control ambiental y de pedir estudios en caso de necesidad.