Fabián Cubero (38) y Nicole Neumann (36) se distanciaron, luego de un año de estar en crisis. El jugador de fútbol reconoció que volvió a tener citas, pero todavía no blanqueó a ninguna mujer. Mientras que la modelo ya oficializó su romance con Facundo Moyano (32) e incluso salieron en los medios fotos de ellos, a los besos, en un viaje que hicieron a España. En una entrevista con Clarín, Poroto explicó que no siente culpa por el fin de su relación con la madre de sus hijas: "En mi caso no, porque fue una separación de común acuerdo. Bancamos la parada durante mucho tiempo tratando de recomponer la relación, pero lamentablemente llegó un momento en que hubo que dar un paso al costado. Creo que ninguno tiene nada que reprochar. Bah… yo, de mi lado, no tengo ningún reproche porque en la relación lo di todo, traté de salvarla también dando todo porque uno piensa en la familia, en los hijos… Pero sí, cuesta dar ese paso al costado. A veces no hay más remedio y decís 'hasta acá llegué' y entonces tuvimos que tomar la decisión de separarnos". Además, el defensor de Vélez reconoció que ver a su ex con otro hombre no fue fácil: "Cuesta al inicio, después uno se acostumbra. El inicio de verla con otro o las primeras fotos cuesta un poco. En nuestro caso, al ser tan públicos, era inevitable verlo. No es que uno se enoje o te duela… pero es una sensación rara después de estar tantos años con alguien verla con otra persona. Pero llega un momento en que decís 'bueno, ya está'". Luego, Fabián explicó cómo lleva adelante la paternidad en esta nueva etapa de su vida: "La relación con las nenas fue siempre igual, excelente. De casado y de separado o divorciado. Trato de ser un padre presente, las acompaño, trato de estar en cada actividad. Las cosas de la casa las hago yo, no tengo empleados. Estoy separado, pero si tengo que lavar, lavo; si tengo que cocinar, cocino y la ropa la llevo al lavadero. Sé manejarme porque tengo experiencia de haber vivido solo muchos años y ahora todo eso me sirve". A pesar de la separación, Neumann y Cubero lograron encontrar un equilibrio para contener a Indiana, Allegra y Sienna: "Lo manejamos bien. Paso mucho tiempo con las nenas porque mi ex mujer trabaja. Por suerte tiene mucho trabajo, entonces activo mucho. El fútbol me lo permite por los horarios. Termino de entrenar a las 12 o un poco más y si no tengo otras obligaciones, activo con ellas, las voy a buscar al colegio, las llevo a hacer sus actividades y lo disfruto mucho porque los días que les toca estar con su mamá las veo menos. No hay días fijos, somos flexibles y tratamos de acomodarnos para que los dos tengamos el tiempo que creemos suficiente". Por último, admitió en toda esta situación lo que más le preocupa es contener a sus hijas: "Hay situaciones en las que veo que les cuesta… están sensibles… las veo tristes por momentos y por momentos no… entonces es una etapa donde necesito transmitir mucha contención y estar alerta para ver sus momentos de debilidad y hacer que esto se les haga lo más llevadero posible. Las cuidamos mucho, apago la tele, guardamos las revistas, tratamos de que no nos agarren los celulares porque por ahí hay preguntas de periodistas, las redes sociales… un montón de cosas. La más grande y la del medio ya saben leer, imaginate todo eso…".     Fuente: infobae