Para Claudia Ruz, no es un Día de la Madre cualquiera, porque pasará esta jornada en “su casa” junto a Paula, de 14 años, y Bautista, de 2 años. Claudia, que en la actualidad se desempeña como ama de casa, explicó en un impactante relato cuando tuvo que irse por un conflicto familiar de la casa de sus padres para hacer con mucho esfuerzo el hogar para ella y sus hijos. “Yo vivía en la casa de mis padres. Ellos fallecieron y al tiempo, surgió un conflicto familiar muy fuerte. Tras atravesar esa situación, me fui y tuve que vivir debajo de un nylon por dos meses. Además, fue a principio de este año, donde pasé mucho calor y lluvias muy fuertes”, explicó detalladamente Claudia en su relato. Tuvo que desprenderse de elementos como una moto o un lavarropas para construir la casa donde vive actualmente: “Vendí prácticamente todo para comprar un terreno en un asentamiento en La Bebida. Lo único que conservé fueron los elementos que consideraba esenciales para mis hijos junto con la heladera y la cocina. Luego de adquirir el terreno, tuve que construir la casa con adobes y palos. Por ellos hago todo, muevo cielo y tierra”. En su testimonio, explicó lo difícil que fue conseguir ayuda de diferentes estamentos: “Fui a diferentes instituciones públicas para pedir una ayuda, pero nadie me recibió. Eso me dio más fuerzas para construir la casa  para mí y los chicos.  Tenía el apoyo de muy poca gente, solo de una hermana y de vecinas que me ayudaron con ropa. La tranquilidad llegó cuando nos trasladamos a la villa donde vivo actualmente”. Además, Claudia resaltó el apoyo brindado por Ayuda Mutua, un organismo que funciona en el departamento Rivadavia: “Tuve la ayuda de una entidad que me brinda contención a través de diversos talleres. Considero que lo material va y viene, pero la ayuda humanitaria es impagable y vale mucho más que cualquier cosa. Además, me prometieron que van a conseguirme un buen trabajo”. También, destacó el mensaje que siempre le brinda a Paula y Bautista y como es su rol como madre: “La enseñanza cotidiana que les brindo a mis hijos es la búsqueda de la verdad. Que traten de ser justos, equitativos, y si tienen que contar con la ayuda de alguien, que no duden en hacerlo. Veo tan pocos valores en los jóvenes y adolescentes. Éstas son cosas que yo aprendí de mis padres, por eso me considero una madre chapada a la antigua. Trato ser muy compañera con ellos y que me consulten cada inquietud que tengan. Siempre les digo que tratemos de comprender cada situación que nos toca”. “Voy a pasar el día de la madre en mi casa con mis hijos. A pesar que me invitaron de varios lugares, quiero estar con ellos en la casa que yo construí. Además, recibí un hermoso regalo hecho por ellos mismos”, fueron las palabras de Claudia, una madre luchadora que pasará su día en el lugar que construyó con tanto esfuerzo.