Después de declarar por primera vez como sospechoso del presunto asesinato de Alberto Nisman, Diego Lagomarsino admitió que le parecía lógico que el fiscal le pidiera un arma la noche que apareció muerto. "Alberto me pidió un arma y yo se la llevé. Todo ese plan de mi lado no existe", dijo en una entrevista a Radio Con Vos. “Me la pidió por un tema de protección a sus hijas y me pareció un planteo lógico porque tengo entendido que los fiscales y los jueces tienen derecho a hacerlo", recordó. Lagomarsino está imputado como partícipe necesario de la muerte de Nisman. Por eso lleva una tobillera electrónica, no puede salir del país y se tiene que presentar cada 15 días en el juzgado de Julián Ercolini. "La tobillera me hace sentir un delincuente que no soy claramente", expresó el sospechoso. "Tengo miedo de ir preso, además porque soy inocente. Que me juzgen por llevar el arma, pero no por algo que no es", aseguró el asesor informático del fiscal. "Por lo que dijeron los peritos del Cuerpo Forense, creo que fue un auto disparo. No sé cuál fue el motivo", indicó. En su último encuentro con Nisman, Lagomarsino contó que "estaba bien" hasta que se quebró cuando habló de las hijas, que no estaban con él. "Alberto me dijo: 'vos sabes lo que es que tus hijas no quieran estar con vos por miedo a que les pase algo'", señaló en el momento que le llevó el arma. "Nunca pensé que podía llegar a atentar contra su vida", aseguró. "Sandra Arroyo Salgado dijo muchas cosas que después se comprobaron que eran falsas", respondió cuando le preguntaron de por qué la exposa del fiscal dijo que lo mataron desde un principio. "Ella dijo que la mano derecha de Nisman empuñaba el arma y que un ejecutor tomó su mano. Ahora aceptó que las dos manos de Alberto estaban abajo, al costado del cuerpo", planteó. Sin embargo, aseguró que no tiene ningún problema en juntarse a hablar con ella: "Desde el primer día que lo quiero hacer". La declaración indagatoria se dio después de que se conociera un informe de Gendarmería que indicó que al fiscal lo mataron entre el 17 y 18 de enero de 2015 con un arma registrada a nombre de Lagomarsino, como parte de un plan orquestado para simular un suicidio. Así, la Justicia Federal lo interrogó por primera vez a casi tres años de la aparición de Nisman con un balazo en la cabeza en el baño de su departamento. El técnico informático ya había declarado en la causa, pero como testigo cuando el caso se tramitaba en el fuero criminal ordinario. FUENTE: TN