Están por un lado los amantes de los perros, el amigo fiel que siempre está al lado del hombre y están por el otro lado los defensores de los gatos, que ponderan su silencio, compañía e independencia. Y en ese escenario animal, también están los que consideran a los caninos más inteligentes frente a los que piensan que los felinos lo son. El debate siempre estuvo planteado. Pero era hora que la ciencia se expidiese. Un estudio de la Universidad Vanderbilt, ubicada en Nashville, Tennessee, EE.UU. determinó que los perros son más inteligentes que los gatos, en función del número de neuronas que cada especie atesora en su corteza cerebral. Se trata de las "pequeñas células grises" asociadas con el pensamiento, la planificación y el comportamiento complejo, todas consideradas como características distintivas de la inteligencia. Se trata del primer estudio que realmente cuenta el número de neuronas corticales en el cerebro de varios carnívoros, incluidos gatos y perros, ha descubierto que los perros poseen significativamente más que los gatos. "En este estudio, estábamos interesados en comparar diferentes especies de carnívoros para ver cómo el número de neuronas en sus cerebros se relaciona con el tamaño de sus cerebros, incluidas algunas especies favoritas, como gatos y perros, leones y osos pardos", explicó en un comunicado Suzana Herculano-Houzel, profesora de Psicología y Ciencias Biológicas, quien desarrolló el método para medir con precisión el número de neuronas en el cerebro. Los resultados del estudio han sido publicados en la revista Frontiers in Neuroanatomy. En cuanto a perros y gatos, el estudio encontró que los perros tienen alrededor de 530 millones de neuronas corticales, mientras que los gatos tienen menos de la mitad, es decir, alrededor de 250 millones. En otra comparación, el ser humano tiene en su cerebro unas 16 mil millones de neuronas). "Creo que la cantidad absoluta de neuronas que tiene un animal, especialmente en la corteza cerebral, determina la riqueza de su estado mental interno y su capacidad de predecir lo que está a punto de suceder en su entorno según la experiencia pasada. Nuestros hallazgos significan para mí que los perros tienen la capacidad biológica de hacer cosas mucho más complejas y flexibles con sus vidas que los gatos". Ahora tenemos algo de biología que las personas pueden tener en cuenta en sus discusiones sobre quién es más inteligente, el gato o el perro", agregó Herculano-Houzel.