Viviana Canosa sorprendi&oacute; y encendi&oacute; a sus seguidores en Instagram con unas fotos muy sensuales.&nbsp; Los hizo desde M&eacute;xico, pa&iacute;s que eligi&oacute; para sus vacaciones junto a su pareja, Alejandro Borensztein y su hija Martina, de cuatro a&ntilde;os. Postales desde la playa y ropa muy transparente, fue el escenario que&nbsp;Viviana eligi&oacute; para prender&nbsp;&nbsp;fuego las redes y dejar&nbsp;a todos con la boca abierta. &nbsp; &nbsp; <p style=" margin:8px 0 0 0; padding:0 4px;">#UltimoDiaDeSpa Logistica2018 en marcha!! #2018 proyectos.. emprendimientos Que se viene???? <p style=" color:#c9c8cd; font-family:Arial,sans-serif; font-size:14px; line-height:17px; margin-bottom:0; margin-top:8px; overflow:hidden; padding:8px 0 7px; text-align:center; text-overflow:ellipsis; white-space:nowrap;">Una publicaci&oacute;n compartida por Viviana (@vivianacanosaok) el 30 de Nov de 2017 a la(s) 10:32 PST &nbsp; <p style=" margin:8px 0 0 0; padding:0 4px;">M&iacute;rala, parece normal... Hasta que la mires de cerca, y de repente te estremezcas al mirar en sus ojos la luz que emana su alma magn&eacute;tica. Yo la vi saliendo entre las ru&iacute;nas en las m&aacute;s duras batallas, la vi lami&eacute;ndose las heridas y acariciando sus cicatrices, que la recordaban que siempre ser&aacute; m&aacute;s grande que el dolor. La vi bailando sobre las aguas que la invitaban a hundirse en el abismo, una y otra vez. La vi nadar a contracorriente hasta naufragar...y comprendiendo que la isla siempre ser&aacute; ella misma y que nada que est&eacute; realmente vivo se deja arrastrar por la marea. La vi riendo a carcajada limpia de la vida y tambi&eacute;n la vi llorar l&aacute;grimas con todos los p&aacute;rpados del mundo lloviendo en ellas. La vi loca de amor y cuerda de miedo. La vi incendiada de pasi&oacute;n y congelada de tristeza. La vi perderse de s&iacute; misma mucho tiempo escuchando los juicios y sentencias de otros hasta que decidi&oacute; la sordera selectiva. La vi morir y la vi resurgir de las cenizas, la vi cantando fracasos con letras de sabidur&iacute;a. Sus ojeras eran malvas que la hac&iacute;an madre, poeta; sus arrugas eran rayos de Sol que la hac&iacute;an hija de la tierra. La vi abrazando a las estrellas y aullando a la luna. La vi trepando los &aacute;rboles y volando con las &aacute;guilas. La vi en las flores y en las abejas. La vi gritando en medio de las multitudes &quot;&iexcl;Libertad!&quot;. La vi revolc&aacute;ndose en la tierra y avivando las hogueras. La vi en el subsuelo m&aacute;s profundo del alma abrazada a las ra&iacute;ces y tambi&eacute;n en la cumbre solitaria lanzando a sus m&aacute;s temibles pesadillas al vac&iacute;o y despoj&aacute;ndose del cemento que la sociedad dej&oacute; impregnada en su alma. La vi despeinada y con insomnio cr&oacute;nico por despertar sue&ntilde;os, abrazar almas, acunar hijos y amasar poemas. La vi aislada de las mentes cuadradas, se&ntilde;alada, juzgada, amada, envidiada, incomprendida, admirada, la vi lanzando semillas en los desiertos, antorcha de luz en mano en las noches oscuras hasta calcinar todo lo que no ten&iacute;a alma. La vi hablando con los p&aacute;jaros y conversando con las piedras. La vi Loca en un mundo que delira entre flores sint&eacute;ticas, una criatura salvaje que camina ingeniosa entre la gente, fr&aacute;gil como mariposa, fuerte y recia como los olivos. Sigue....... <p style=" color:#c9c8cd; font-family:Arial,sans-serif; font-size:14px; line-height:17px; margin-bottom:0; margin-top:8px; overflow:hidden; padding:8px 0 7px; text-align:center; text-overflow:ellipsis; white-space:nowrap;">Una publicaci&oacute;n compartida por Viviana (@vivianacanosaok) el 30 de Nov de 2017 a la(s) 1:33 PST &nbsp;