La estimación provisoria del Producto Bruto Interno (PBI) por parte del Indec arrojó en el tercer trimestre de 2017 un giro positivo de casi 8 puntos porcentuales con relación al mismo período del año anterior, habida cuenta de que pasó de un receso de 3,7% a un avance de 4,2 por ciento. De ahí que en valores constantes la generación de riqueza por parte del conjunto de los factores de producción fue apenas similar al nivel que se había alcanzado antes de las elecciones generales de 2015. Sin embargo entre uno y otro período las condiciones macroeconómicas giraron del exceso de controles, atraso cambiario y tarifario, limitaciones a las exportaciones e importaciones, a otro escenario que se encamina a imitar las prácticas más generalizadas en otros países.  En valores constantes el nivel de actividad volvió al nivel de dos años antes El PBI desestacionalizado del tercer trimestre de 2017 con respecto al segundo trimestre arrojó una variación positiva de 0,9%; y un acumulado en los primeros nueve meses de una modesta expansión de 2,5%, en contraste con un declive de 2,4% en similar período del año anterior. El Indec valuó el PBI al cierre del tercer trimestre en 10,5 billones de pesos, equivalente al año como se mide esta variable, unos USD 600 mil millones. En ese caso registró un incremento de poco más de 10%, fenómeno que se atribuye en exclusiva al efecto del atraso cambiario respecto de la tasa de inflación interna.  El PBI equivalente en dólares ascendió a USD 600 mil millones, al tipo de cambio promedio del tercer trimestre. Subió 10,4% por efecto del atraso cambiario Del lado de la producción los sectores más expansivos en los pasados doce meses a septiembre fueron la pesca 13,2%; construcción 12,8%; intermediación financiera 6,8%; y actividad inmobiliaria y empresas de alquiler 4,8 por ciento. Por el contrario se mantuvieron en la senda contractiva la explotación de minas y canteras 3,3%, principalmente la vinculada con la extracción petrolera; los servicios de electricidad, gas y agua 1,9%; el servicio doméstico en hogares privados 1 por ciento. Mientras que entre la demanda agregada se destacó la reactivación de la formación bruta de capital fijo, con una expansión de 13,9%, en contraste con una contracción de 8,2%, doce meses antes. También sobresalió el impulso del consumo privado 4,2%, y en menor medida del sector público, en el primer caso desde una contracción de 2,9%; y en el segundo por sobre una suba de 0,9% en el tercer trimestre de 2016.           Fuente: infobae