Este jueves clausuraron la confitería de la Terminal de Ómnibus. Su propietario tendrá un determinado plazo para quitar sus pertenencias y luego la provincia volverá a concesionar. El juez de Faltas, Horacio Morando fue el encargado de firmar la orden judicial y determinó que el local no cumple con lo requerido en cuanto a higiene y seguridad. El concesionario perdió el derecho de explotar el local comercial y deberá pagar una multa de $10.000. La concesión llegó a su fin coincidiendo con la construcción de la nueva terminal.