El joven había tenido una discusión el miércoles con unos vecinos por una deuda de 500 mil bolívares, Desde ese día no apareció. Familiares comenzaron a buscarlo y formularon la denuncia. Las fuerzas de seguridad realizaron varios interrogatorios a los allegados e incluso a los vecinos con quien Yerson había discutido. Finalmente confesaron que asesinaron al muchacho y luego se lo comieron. Los criminales, padre e hijo, declararon que atacaron al joven con un tubo propinándole un golpe en la cabeza, posteriormente, le arrancaron la piel y los músculos para comérselos. Los huesos de la víctima fueron hallados junto con el cadáver de otro sujeto sin identificar. Primas de Yerson presenciaron cuando fue asesinado.