Está viviendo su sueño. O, quizá, transitando una realidad para la que se preparó desde que se subió a una moto a los tres años. Desde que empezó a caminar, en su Salta natal, Kevin Benavides estuvo rodeado por las motos de su padre, vendedor y a la vez piloto a nivel nacional. No sorprendió que a los 9 empezara a competir, a los 16 ya se hiciera profesional y a los 21 fuera la imagen del Enduro para marcas internacionales. En este 2018, el piloto oficial Honda terminó de saltar a la fama y confirmó su jerarquía mundial al ser subcampeón del Dakar. Pero, lejos de detener su crecimiento, el pasado fin de semana se coronó en el Rally de Atacama y se subió a la punta del Campeonato del Mundo Rally Cross Country FIM. El salteño acumula 50 puntos e iguala al chileno Pablo Quintanilla (bicampeón mundial 2016/2017),dejando atrás al polaco Maciej Giemza (42), al australiano Toby Price (36), al austríaco Matthias Walkner (34) y al inglés Sam Sunderland (27) cuando quedan dos fechas. Este finde se viene la cuarta en Argentina. Nada menos que el Desafío Ruta 40, que Benavides ya ganó en 2016 y 2017, buenos augurios pensando en ser el primer argentino campeón mundial de esta especialidad. “Estoy pasando mi mejor momento deportivo luego de años de mucho trabajo que me han permitido llegar a lo que soy hoy. Me siento muy bien físicamente, confiado en carrera y con una moto bárbara. La experiencia del Dakar me sirvió mucho y terminó de convencerme de que es posible ir por todo”, asegura Kevin, quien viene de hacer una carrera perfecta en el áspero desierto chileno, ganando tres de las cinco etapas.