Barcelona, con un Lionel Messi encendido, superó por 4 a 2 al Tottenham Hotspur en el mítico estadio de Wembley, por la segunda fecha de grupos de la Champions League. El elenco culé comenzó ganando “desde el vestuario” gracias al gol del brasileño Philippe Coutinho, quien a los 2 minutos de juego definió con clase tras una precisa asistencia de Messi. El elenco dirigido por Ernesto Valverde fue dominador claro durante el primer tiempo y el croata Ivan Rakitic, con una volea espectacular, estiró la ventaja en el marcador a los 28 de la etapa inicial. Ya en el complemento, el trámite del encuentro se emparejó y Harry Kane, con un certero derechazo cruzado, descontó para los locales.  Pero a los pocos minutos apareció Messi, quien definió una maniobra colectiva con un zurdazo sutil luego de estrellar dos tiros en los palos.  Cuando todo parecía indicar que sería un cómodo triunfo de la visita, Erik Lamela volvió a poner en partido al conjunto inglés con un zurdazo que vulneró a Ter Stegen al desviarse en un defensor del equipo catalán. El elenco inglés no se daba por vencido y quería dejar al menos un punto en casa, pero la “Pulga” se encargó de que ese intento sea en vano.  Con el tiempo casi cumplido, el rosarino quedó solo con el arquero francés Hugo Lloris luego de una asistencia sin tocarla del uruguayo Luis Suárez y puso cifras definitivas.  Con esta necesitada victoria, el Barcelona lidera el Grupo B del certamen europeo con 6 puntos, misma cantidad que posee el Inter de Milán gracias a su triunfo frente al PSV holandés.