La primera reacción de los candidatos presidenciales de la oposición ante el anuncio del acuerdo comercial entre el Mercosur y la Unión Europea se ubicó entre la cautela y la crítica. En su mayoría, se apeló a las redes sociales para difundir sus posiciones. Esta cautela, acaso, se deba a que se trata de un acuerdo político, del que resta aún conocer los detalles puntuales para evaluar su impacto económico concreto. El candidato presidencial por el Frente de Todos, Alberto Fernández, quien visitó Misiones en busca de la adhesión a su candidatura por parte del oficialismo provincial, eligió la red social Twitter para dar a conocer su posición frente al acuerdo entre los dos bloques económicos continentales: “No queda claro cuáles serían los beneficios concretos para nuestro país. Pero sí queda claro cuáles serían los perjuicios para nuestra industria y el trabajo argentino. Un acuerdo así no genera nada para festejar sino muchos motivos para preocuparnos”, dijo el candidato presidencial por el frente que componen el PJ, el kirchnerismo y el massista Frente Renovador. Consenso Federal, en tanto, que impulsa la candidatura presidencial del exministro de Economía, Roberto Lavagna, ante la consulta de este medio, postergó cualquier tipo de evaluación hasta que se conozca la “letra chica” del acuerdo. “¡Excelente!”, expresó José Luis Espert, candidato presidencial por el frente liberal Despertar, también desde su cuenta de Twitter. El economista agregó, a modo de propuesta: “Ahora hay que bajar el gasto público y bajar impuestos, bajar los costos laborales y dejar de abaratar al dólar para no bastardear la apertura como en épocas pasadas”. “El acuerdo, básicamente, va a beneficiar a sectores de los agroneogocios. Además de los sectores agrícolas, las automotrices europeas que van a tener liberado las importaciones de las autopartes”, dijo a este medio el precandidato presidencial por el Frente de Izquierda-Unidad, Nicolás del Caño. El dirigente del Partido Socialista de los Trabajadores criticó al Gobierno nacional por presentar el acuerdo “como un beneficio a los consumidores cuando hay una caída del salario, según algunas estimaciones, del 17% en la era Macri”. “Este acuerdo va en contra de la exportación de los productos industriales argentinos, ya que más del 90% de lo que le compramos a Europa fueron productos de valor agregado, mientras nosotros esencialmente exportamos productos con bajisimo valor agregado”, dijo Del Caño. Sobre la posición de la izquierda en el Congreso, cuando el tratado sea puesto a consideración, Del Caño sostuvo: “Veremos cuál es la letra chica. Y habrá que ver en qué momento llega. Hasta ahora el Congreso el fue bastante funcional a Macri”. La precandidata a presidenta por el Nuevo Mas, Manuela Castañeira, ante la consulta de este medio, expresó su rechazo al acuerdo. “Es un tratado de libre comercio que para los países dependientes como la Argentina significa una primarización de su economía, un ataque a la industria, que solo puede tener como resultado, mayores despidos y suspensiones, sobre todo en el sector automotriz”, dijo. El excanciller kirchnerista Jorge Taiana, también apeló a Twitter para expresar su posición. “La Argentina privilegió un ‘supuesto’ éxito diplomático de cara a las elecciones, negociando un mal acuerdo con la UE, q no se consultó con los sectores involucrados y que perjudica el trabajo y la producción nacional. El cortoplacismo constituye un grave error de política exterior”, evaluó Taiana. FUENTE: Vía País