El ex presidente boliviano Evo Morales pidió hoy desde su exilio en México al papa Francisco y a la ONU que intercedan para pacificar a su convulsionado país tras su renuncia obligada, ante las presiones de militares y la oposición.  Poco antes, Morales había condenado la decisión del presidente norteamericano, Donald Trump, "de reconocer al gobierno de facto y autoproclamado por la derecha".