El interbloque de Juntos por el Cambio se retiró de la sesión especial de la Cámara de Diputados en la que se trata la ley de reforma de las jubilaciones de privilegio, luego de denunciar anomalías en la conformación del quórum por la participación del diputado y futuro embajador en Brasil, Daniel Scioli. El jefe del interbloque, Mario Negri, denunció que el quórum "era inválido por la presencia de un diputado que es parte del Poder Ejecutivo" y anunció que "presentará una demanda en la justicia para declarar invalida la sesión". El oficialismo consiguió esta tarde reunir el quórum necesario en la Cámara de Diputados para debatir el proyecto de reforma de las jubilaciones de privilegio de la justicia y el servicio exterior, con el acompañamiento de los diputados de los bloques de Unidad Federal y de la izquierda pero sin la presencia en las bancas de Juntos por el Cambio. El proyecto La iniciativa establece el aumento gradual de la edad jubilatoria hasta los 65 años y el cálculo de los haberes como promedio de los aportes de los últimos 10 años; además de aumentar un siete por ciento el aporte de activos del Servicio Exterior, entre otras cuestiones. El proyecto propone también que la jubilación de los magistrados será equivalente al 82 por ciento del promedio de las últimas ciento veinte remuneraciones actualizadas, es decir de los últimos diez años. La cuestión de las jubilaciones de privilegio había generado polémica durante el debate de la Ley de Solidaridad Social y Reactivación Productiva que se discutió en el Congreso durante diciembre. Allí, la oposición e incluso algunos oficialistas se quejaron porque jueces y diplomáticos quedaban al margen de la suspensión de la aplicación de la ley de movilidad previsional, que alcanzaba a la mayoría de los beneficiarios del sistema. En los fundamentos del proyecto, el gobierno nacional, señaló que en el marco de la emergencia pública en materia previsional "se ha propuesto fortalecer el carácter redistributivo y solidario de los haberes previsionales considerando los distintos regímenes que lo integran como un sistema único, asegurando, al mismo tiempo, la sustentabilidad económica, financiera y actuarial del mismo en el largo plazo". "Al respecto, debe advertirse que el creciente déficit que exhibe el sistema previsional, que ha alcanzado en los últimos años valores cercanos a los dos puntos porcentuales del Producto Bruto Interno (PBI), impone la necesidad de tornar las medidas conducentes a la corrección de tales desequilibrios", indicó. En ese sentido, remarcó que "el proyecto es parte de un conjunto de iniciativas propiciadas con el fin de reducir las inequidades existentes en el sistema previsional, en buena parte originadas por regímenes especiales cuyas reglas de acceso y determinación de los beneficios han consolidado verdaderos sectores de privilegio dentro del régimen público de reparto sobre el que impactan". "Si bien la vinculación de los regímenes previsionales especiales con los principios de unidad y solidaridad de la seguridad social es motivo de recurrente debate, corresponde aclarar que dichos regímenes son aquellos por los cuales se busca asegurar a ciertos sectores ocupacionales condiciones jubilatorias más beneficiosas por el tipo de actividad que desarrollan; las que usualmente demandan una dedicación especial ligada a una carrera", aclaró. Para el Poder Ejecutivo, "la preservación del principio de solidaridad requiere que la protección dispensada por el régimen especial guarde una estrecha relación con el esfuerzo contributivo de los afiliados, a fin de que l financiamiento de dicho régimen no sea solventado con los recursos comunes de la seguridad social". "Por ello, el logro de una adecuada proporcionalidad entre el haber y el esfuerzo de cotización asumido es una condición fundamental para prevenir la generación de una redistribución regresiva que en los hechos constituya al régimen jubilatorio especial en un régimen de privilegio", concluyó.