Este martes en Italia hubo 604 fallecidos a causa del virus, y el número de positivos subió a 880 en un día, la cifra más baja desde el pasado 10 de marzo, el total de los fallecidos es de 17.127.  Giovanni Rezza, del Instituto Superior de Salud, durante la conferencia de prensa diaria, aseguró: "Por fin parece que estamos empezando a ver una disminución en los nuevos casos: en la curva epidémica, después de una fase de meseta, parece haber un descenso y la curva tiende a doblarse hacia abajo. Pero hay que esperar hasta mañana o pasado para respirar con alivio". La gran mayoría de los positivos, 61.557, están en aislamiento domiciliario, otros 28.718 están hospitalizados con síntomas -menos que el día anterior- y solo 3.792 están en cuidados intensivos (106 menos que ayer), lo que mantiene una reducción de estos pacientes graves por cuarto día consecutivo. Por su parte, el primer ministro italiano, Giuseppe Conte, consultó a los principales científicos el martes sobre formas de poner fin con seguridad a un bloqueo de un mes destinado a detener una pandemia que ha matado a miles y dejado a millones desempleados. En su videoconferencia con los científicos se enfoca oficialmente en la “Fase Dos”, el nombre formal de la idea de tomar medidas progresivas para aliviar las restricciones que comenzaron hace casi un mes, el 9 de marzo. Los científicos primero se centrarán en cuál de las fábricas económicamente más importantes del país en el corazón industrial del norte para permitir reanudar la producción el 14 de abril.