El papa Francisco pidió que la comunidad internacional ayude a Líbano a "superar la grave crisis que está atravesando", profundizada por las explosiones que el martes provocaron decenas de muertos y miles de heridos en la zona portuaria de Beirut.  Las primeras versiones indican que la fuente de la explosión habría sido un gran incendio en un almacén de fuegos artificiales cerca del puerto de Beirut.   "Ayer, en Beirut, en la zona del puerto, fortísimas explosiones causaron decenas de muertos y miles de heridos y destrucciones muy graves. Rezamos por las víctimas y sus familiares", declaró el pontífice durante la audiencia general en el Palacio Apostólico del Vaticano. "Rezamos por el Líbano, para que con el esfuerzo de todos sus componentes políticos, sociales y religiosos pueda afrontar este momento tan trágico y doloroso", agregó. Durante su catequesis, Francisco hizo mención a la pandemia de coronavirus que "sigue causando dolor y sufrimiento en toda la humanidad, sembrando muerte y un sinnúmero de enfermos": "Además, muchas personas y familias viven un tiempo de incertidumbre por los problemas socioeconómicos que ha producido, y que golpean sobre todo a los más pobres", remarcó.