Jueves 28.03.2024
Actualizado hace 10min.

Vacunas contra el Covid-19 en proceso y disputa por quienes serán los primeros en vacunarse

 Una vez que el producto esté listo viene este segundo problema. Inmunidad de rebaño, la ventaja de los ricos y la utopía de erradicar al virus que afecta al mundo. 

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Las vacunas son un tema recurrente en estos tiempos y como nunca en la historia el mundo está pendiente de cada paso al frente o hacia atrás que dan los laboratorios. Nadie fuera de la ciencia jamás se interesó en este tipo de procesos y esto trajo demandas constantes y presiones que solamente generan irritación y no aportan en absolutamente nada.

Sin embargo, esta batalla por obtener el resultado cuanto antes de los grandes gobierno, encubre una nueva polémica. Una vez que esté todo dado, ¿a quienes se va a vacunar primero? Esta respuesta es muy difícil de resolver, pero Fabricio Ballarini te adelanta un poco como se trabaja en este tipo de casos.

Hoy por hoy, y gracias a una inyección de miles y miles de millones de dólares, en la actualidad existen más de 130 proyectos de vacunas contra el COVID-19. De esos 130, 9 son los más avanzados y de esos, 3 son los que tienen más posibilidades de llegar antes a tu brazo. 

Moderna es la primera y confirmó que puede fabricar 100 millones de dosis, con la salvedad que las primeras están ya compradas por Estados Unidos (guiño, guiño). Pfizer podría aportar unas 1.300 millones de dosis para fines de 2021 y la famosa vacuna de Oxford se sumaría con otras 2.000 millones de dosis, obviamente si logra seguir adelante.

Hasta acá vamos bien. Pero ahora viene lo importante. Atrás de cada trabajo de los profesionales, existe un nacionalismo de las vacunas. Y a medida que nos acercamos a la obtención de una o varias, emerge la verdad de todo: en principio, no tendremos vacunas para todos.

La OMS propuso una "solución equitativa" y tiene que ver con que inicialmente las vacunas sean distribuidas en fases proporcionales. Esto sería con ciertos porcentajes en cuanto a población y personas de riesgo, pero esto es matemáticas simple: los países con mayor población se llevarían la mayor cantidad de dosis.

El Plan B es también polémico. Se plantea que los primeros tienen que ser los que tienen más chances de contraer el virus de sufrir más daños. Allí entra el personal sanitario, los mayores de 65 años y quienes tienen enfermedades de base. Lógico, claro, pero también genera disputa porque los países más ricos son los que tienen más personal de salud y más cantidad de adultos mayores.

La ayuda a los que menos tienen sería lo ideal, pero serían pérdidas millonarias y tampoco cierra en cuanto a los números. Entonces el camino es bastante común, aunque nada facil y se apunta a la inmunidad de rebaño, que consiste en proteger a los más débiles con la vacuna y así se empieza a cortar la circulación del virus en una población hasta eliminarla. Hoy por hoy, esto parece una utopía pero hay de de que ese día llegará.