Nadie esperaba que el casamiento se desarrollara este jueves, pero los tortolitos disfrutaron a pleno de este momento tan especial. El conductor de América ya había anunciado que la pareja daría el sí, para unir sus caminos en lo legal y también en lo espiritual. Claro que la pandemia trastocó los planes y originó un camino alternativo, distinto al proyectado. Luis y Braulio se guardaron bajo siete llaves este evento tan trascendental, apenas le compartieron la invitación a los más cercanos, a esos seres queridos y se sumergieron en el edificio tradicional de la calle Uruguay, en la Ciudad de Buenos Aires.   Claro que los medios accedieron a la información en el último momento y se montó una cobertura intensa de este día tan maravilloso para Novaresio y Bauab. Así se pudo registrar la mítica salida del registro civil, ese instante en que llueven los granos de arroz y sobre todo la felicidad. En todo ese contexto, Paparazzi registró con lujo de detalles cada movimiento de la pareja y logró transmitir las emociones que sobrevolaban la atmósfera en este paso trascendental en la vida de Novaresio. Mientras los tortolitos atendían a la prensa se produjo un episodio peculiar, ya que apareció la madre de Braulio, muy coqueta. El empresario inmobiliario se percató de la cercanía de su primogénita y dejó los micrófonos para fundirse en un tierno abrazo. Lo más llamativo se centró en la reacción de la mamá, que prefirió evitar los flashes, como abrumada por la intensidad de los medios, aunque Bauab la convenció y la presentó en sociedad. Un hermoso momento.