Este martes se dio a conocer un violento hecho que ocurrió el pasado domingo en Chimbas, en el que dos delincuentes engañaron a un taxista con realizar un viaje a la Difunta Correa y le propinaron una brutal golpiza para robarle. Fuentes judiciales informaron que el suceso se desarrolló en la siesta del pasado domingo. El chofer del taxi recibió un llamado a su celular en el que le solicitaron un traslado hasta la Difunta Correa, en Caucete. Ante la oportunidad de realizar un viaje largo y de recibir un pago mayor al cmún de todos los días, el hombre decidió ir en busca de los supuestos pasajeros.  Cuando circulaban por Benavídez, a unos 500 metros de la Finca Don Paulino, en Chimbas, aproximadamente a las 14, ambos sujetos se abalanzaron sobre el chofer y le propinaron una brutal paliza, dejándolo desfigurado.  La víctima, que había detenido su marcha, se tiró del taxi y sus atacantes siguieron golpeándolo. En ese momento, uno de los asaltantes sustrajo un juego de llaves del taxi y también diez mil pesos. Luego de los golpes, uno de los ladrones siguió por Benavídez, mientras que su compañero obligó al agredido a subir al auto y lo hizo regresar por esa misma calle. Al llegar a la intersección con calle Las Flores, una mujer policía que se encontraba en un puesto policial advirtió las lesiones de la víctima, por lo que hizo detener el vehículo.  El atacante que acompañaba al damnificado descendió del taxi y señaló a su compañero como el autor de las lesiones. Luego se subió súbitamente a un Ford Taunus que pasaba por el lugar diciendo que lo ayudaran porque le habían intentado robar y así logró huir. La víctima, ya en el puesto policial que se encuentra ubicado a unos 1.000 metros del lugar del hecho, pudo explicar lo sucedido a la funcionaria policial. La agente solicitó apoyo y, al entrevistar al damnificado, éste les contó lo sucedido y les describió las prendas que vestían sus agresores. Uno de los uniformados salió en búsqueda de uno de los atacantes, dando con él a unos 100 metros de la Finca Don Paulino, por Benavídez. Allí, al advertir la coincidencia con las prendas de vestir descriptas, lo entrevistó y éste se identificó como Mario Alberto Durán. Al practicarle el palpado de emergencia, el sujeto tenía en su mano una llave correspondiente a la marca del auto de la víctima y una billetera con billetes de mil pesos, entre otros efectos, por lo que se procedió a su aprehendimiento. El otro atacante, que simuló haber sido víctima de un delito, fue perseguido por otro policía y cuando el sujeto descendió del auto que lo llevaba, en calle Marcelo T. de Alvear, lo detuvieron. Este último fue identificado como Agustín Eduardo Frías.  El taxista fue bestialmente golpeado y debió ser atendido por personal médico del 107 y luego trasladado al servicio de urgencias del Hospital Rawson. Este martes se realizó la audiencia de formalización del caso, pero al no haber acuerdo para un juicio abreviado, Durán y Frías deberán esperar para el juicio que será el próximo martes. Allí, conocerán su condena. Fuente : Diario de Cuyo