En la madrugada de este jueves, varios vecinos del barrio Empresa Mayo llamaron al 911 luego de escuchar gritos e insultos en uno de los departamentos. Cuando la Policía llegó, la presunta víctima mintió y negó haber sido víctima de violencia de género, a pesar de estar ensangrentada. Minutos después, el agresor fue encontrado escondido debajo de la cama, pero ella siguió negada a realizar la denuncia y a recibir asistencia médica.  El presunto agresor es Javier Roberto Olivarez, detenido en la Comisaría Sexta.  El confuso episodio requirió de la persistencia de los agentes policiales en determinar que estaba pasando. Personal policial le preguntó a la chica si había sido agredida y la mujer -siempre desde el interior del departamento y sin dejar ingresar al personal policia-, negó cualquier agresión y ante la insistencia de la Policía de querer ingresar, la mujer les niega el ingreso porque según manifiesta, estaba su hija de 5 años durmiendo y no había ningún hombre en la vivienda.  Ante la insistencia del personal policial a fin de verificar si la supuesta víctima no se encontraba bajo presión o amenaza del agresor, ya que la misma no encendía las luces del departamento, es que se puso en conocimiento del ayudante fiscal de turno de dicha situación. Mientras tanto, personal policial entrevistó a algunos vecinos sobre lo sucedido, quienes ratificaban que la mujer había sido agredida por su pareja en el pasillo del segundo piso. A los minutos y ya con la presencia de la fiscal Virginia Branca, una de las vecinas expresa que el agresor se encontraba en el interior del departamento. Pero como la víctima continuaba negando el ingreso al departamento y ante la gravedad de los hechos, la fiscal solicitó orden de allanamiento y detención, que fue requerido vía telefónica desde la UFI CAVIG al Juez de Turno de Flagrancia. Una vez enviada la orden, y mientras se esperaba su autorización, la víctima accedió a autorizar a que personal policial femenino pueda inspeccionar el interior de la vivienda.  Una mujer policía ingresó al departamento portando una cámara personal y cuando la víctima por fin accedió a prender la luz, se pudo observar varios vasos de vidrio rotos en el piso. Luego al ingresar al dormitorio, los efectivos pudieron notar que la mujer había mentido porque no se encontraba ningún menor y sí el agresor escondido debajo de la cama. Al ser detenido comenzó a agredir verbalmente al personal policial.  La víctima se  negó a ser trasladada a la UFI CAVIG a fin de ser revisada por el médico legista, como así también, no quería radicar la denuncia correspondiente y tampoco quería recibir atención médica. Olivarez fue trasladado a la Comisaría Sexta donde se encuentra detenido, a la orden de los pasos a seguir por parte del Ministerio Público Fiscal.Fue