Los empresarios expresaron su apoyo al lanzamiento del programa de Precios Justos que anunció hoy el ministro de Economía, Sergio Massa. Los ejecutivos que estuvieron presentes en el acto, junto con el secretario de Comercio, Matías Tombolini, y los sindicalistas Héctor Daer (CGT), Héctor Morcillo (Alimentación) y Carlos Pérez (Comercio), fueron Alfredo Coto, Marcelo Siano de Arcor, Augusto Torres Campell de Molinos, Walter López de Queruclor, Francisco De Narváez de Chango Mas, Daniel Funes de Rioja de la Copal-UIA, Lucas Menoyo de la cadena homónima y Víctor Fera de Maxiconsumo. De Narváez señaló que “este es un momento para que todos pongamos el hombro y lo mejor de cada uno. Por eso estamos hoy acá”. “Estamos ante un entorno complejo (eso no hay duda), pero hay voluntad y decisión de salir adelante”, señaló el empresario. “En ese sentido, cada uno de nosotros tiene la obligación no solo de buscar opciones y alternativas de forma individual (al interior de sus compañías), sino también en conjunto con otros actores de la economía y con el Estado, para asegurar el acceso a productos básicos y precios de referencia claros”, afirmó. “Puntualmente, este acuerdo que congela el precio de una canasta de 1.700 referencias y define una pauta de aumento fija (del 4% mensual) para el resto de los productos, no solo es una respuesta a este desafío, sino que -a su vez- brinda una mayor previsibilidad y referencia de precios a los consumidores”, detalló De Narváez. “En el pasado, toda iniciativa en este sentido (como Precios Cuidados, por ejemplo) ha tenido en nosotros un aliado y este compromiso no es la excepción”, concluyó. Los mayoristas, adentro Por su parte, Víctor Fera señaló: “Es la primera vez que los mayoristas vamos a participar de un programa de estas características, antes era Precios Cuidados pero nunca nos integramos, ahora en cambio sí. Lo vamos hacer con gran predisposición y lo vamos a respetar. Eso sí, la mercadería tiene que llegar a los precios acordados”. “A diferencia de planes anteriores, esta vez puede funcionar porque es un programa más amplio, antes estaba dirigido a una elite de la población, la que compraba en supermercados”. Por supuesto, aclaró, “va a depender de los márgenes de utilidad y la escala de los fabricantes pero la idea es hacer un esfuerzo para poder bajar más los precios para que los pequeños comercios también puedan tener los valores acordados”. En tanto, Daniel Funes de Rioja expresó: “Si la Argentina no arregla su economía, está claro que cualquier medida anti inflacionaria es muy limitada, porque hay impacto en los costos, nacionales e internacionales, que tiene que ver con la logística, el combustible, que en el caso de los alimentos van de 15% al 30 por ciento”. “Esto no es un congelamiento, son precios acordados, con una negociación que es empresa por empresa y en la que hay que ver a qué variable quedan sujetos para ser sustentables en el corto plazo”. Fuente: Infobae