Las intensas lluvias de los últimos días han provocado que el agua que ingresa al Establecimiento Potabilizador en Marquesado de OSSE registre un alto grado de turbidez que ha afectado la disponibilidad del servicio. Por esta razón, la producción de agua potable se ha visto reducida en un tercio ante lo cual desde el organismo han solicitado a la población un uso medido y no derrochar.  La turbiedad del agua se produce debido a que las tomas que alimentan la planta de Marquesado están ubicadas en la zona del dique repartidor San Emiliano y con las tormentas bajan crecientes con material de arrastre que producen ese fenómeno en el agua. Frente a esa situación, en la planta deben recurrir a cerrar las compuertas a la espera de que el agua se aclare y por eso hay menos disponible para potabilizar. Según informó el presidente de la empresa, Guillermo Sirerol, ningún barrio se ha quedado sin agua, aunque si algunas zonas, sobre todo las aledañas a la planta potabilizadora, tienen menos presión. Y garantizó que el agua que se distribuye es perfectamente apta para el consumo humano. Si, como se prevé, continúan las tormentas la situación puede perdurar algunos días más. El funcionario aclaró que si en el dique de Ullum hubiera más agua se podría desembalsar al río y así se aceleraría el proceso para obtener agua más limpia, pero en época de crisis hídrica como la actual eso no puede suceder. De acuerdo a lo informado por el Laboratorio Aguas de OSSE, el agua potable continúa siendo apta para consumo humano. En caso de ser necesario, se sugiere a los usuarios hervirla durante 3 minutos y dejar reposar unos minutos más. Además, se recomienda el uso responsable del agua potable, con acciones como cuidar la reserva del tanque domiciliario, priorizar el consumo de agua potable para acciones vitales y no regar ni lavar veredas ni autos. Y menos llenar piletas.