El futbolista brasileño de 39 años, Dani Alves, seguirá en prisión, dado que la Justicia volvió a negarle el pedido de excarcelación, sostenido en el “riesgo de fuga” que presenta. El tribunal argumenta que esta potencial fuga podría darse por “la elevada pena que puede serle impuesta en la presente causa y los severos indicios de criminalidad contra el mismo”. Alves está acusado de un presunto abuso sexual perpetuado a fines del año pasado (30 de diciembre) y la denuncia se radicó el 2 de enero. Desde aquel momento, el futbolista cambió la versión de los hechos varias veces en sus declaraciones, y en un primer momento había negado haber mantenido relaciones con la joven que lo acusa, para “proteger” a su propia mujer, pero luego admitió que el hecho había sucedido. Finalmente, en su descargo, manifestó que mantuvieron “relaciones consensuadas”.  LA DENUNCIA  El pasado 2 de enero, una joven denunció a Dani Alves de haber sido violada por él en el baño reservado de la discoteca Sutton de Barcelona. En un primer momento, el jugador negó conocer a la joven. Pero luego cambió varias veces su versión de los hechos, hasta que finalmente admitió que mantuvo relaciones consensuadas con ella. Para el 20 de enero se decretó su ingreso a prisión preventiva y sin fianza.