Hace más de una semana, Rosalba Albarracín, de 71 años, fue asesinada a golpes en su casa. En ese momento, la UFI de Delitos Especiales actuó en el caso para dar con el autor del crimen. Hoy, la Fiscalía pedirá que se use mayor tecnología para la recolección de muestras genéticas y otras pruebas que puedan servir. El día de este trágico hecho, se pidió a los peritos que no se utilice reactivos para localizar rastros del homicida. Considerando que los químicos suelen destruir las evidencias. Pero, sólo se encontraron huelas incompletas o inidóneas. Ante la falta de pruebas suficientes, la Fiscalía pedirá un nuevo y profundo rastrillaje, con tecnología avanzada, para buscar rastros genéticos (ADN) y cualquier otro rastro que pueda servir como guía para dar con el autor del crimen. La justicia sospecha de un crimen por robo. El día de su muerte, la víctima abrió la puerta de su casa, se encontraba sola y fue brutalmente golpeada. Además, los cajones de su casa estaban abiertos, lo que indica que se buscaban pertenencias. Siguen las investigaciones del caso hasta dar con el homicida.