El represor que actuó en San Juan durante la última dictadura militar, Jorge Olivera, volvió a estar en el ojo de la polémica. Tras recibir dos condenas perpetuas por su papel en el último Golpe de Estado, sigue sorprendiendo con sus peticiones. En primer lugar consiguió la domiciliaria y al no estar conforme, solicitó permisos para ir al gimnasio con justificación médica. Por intercesión de su abogado defensor Esteban Chervin, Olivera viene solicitando, desde diciembre del 2021, poder salir de su domicilio para asistir al gimnasio día por medio. Incluso en la solicitud se adjuntó un certificado médico firmado por el doctor Mario Caponnetto. El pedido fue rechazado, pero no conforme con eso, en diciembre del año siguiente (2022) volvió a insistir su abogado defensor con un certificado emitido por el mismo profesional. En esta oportunidad, el documento fue rechazado porque no contaba con fecha.  Eso detonó la investigación en la que se determinó que el médico Caponnetto solo había labrado un certificado, durante el 2021. El fiscal federal Francisco Maldonado señaló entonces que el militar retirado insistió en la solicitud para dejar la prisión domiciliaria con un documento adulterado.  De esta manera, el represor Jorge Olivera regresará a la cárcel para cumplir las condenas que pesan sobre él. La primera fue dictada el 3 de julio del 2013 y la segunda en octubre del 2018, por delitos de lesa humanidad. Actualmente se encuentra transitando su tercer procesamiento judicial, por el mismo delito, donde el fiscal de la causa Dante Vega solicitó la misma pena.