Córdoba eligió este domingo gobernador, 44 legisladores provinciales, autoridades del Tribunal de Cuentas e intendente de la capital, en una jornada en la que los cordobeses estrenaron la boleta única de papel. En tanto, Formosa también eligió mandatario provincial, vice, 15 bancas legislativas, intendencias y concejales.  A las 18, cerraron las elecciones a gobernador, vice, legisladores y tribunos de Cuentas en Córdoba, y ahora la espera se extenderá aproximadamente hasta las 21, cuando se estima que la Justicia Electoral comenzará a dar a conocer los primeros resultados oficiales. Todo indica que se trató de una elección con baja participación, que en los primeros cómputos proyectaba un porcentaje por debajo del 70%, la cifra histórica en Córdoba. La competencia electoral en la provincia tuvo en la Boleta Única de Sufragio 11 fórmulas, con dos candidatos con chances reales de ganar: Martín Llaryora, de Hacemos Unidos por Córdoba, y Luis Juez, de Juntos por el Cambio. A lo largo del día, tanto desde el búnker del oficialismo como de la oposición, circularon encuestas “boca de urna” que mostraban diferentes resultados y que fueron actualizándose con el correr de las horas. Los supuestos estudios de opinión pública llegaron desde temprano a los teléfonos de periodistas, dirigentes y hasta de fiscales de mesa de las fuerzas que los repartían. Como se sabe, la Justicia Electoral prohiben su difusión hasta tres horas después de los comicios. En este caso, dado que los resultados son muy diferentes, ni siquiera permiten inferir tendencias. La participación de este domingo es una de las cifras más bajas que se produjeron en una cita electoral para gobernador en Córdoba. La más alto sucedió en 1983, cuando el 88,35% concurrió a las urnas. La más baja se produjo en 2007, cuando bajó al 72,01%. En 2019, en la última elección municipal, la participación había sido del 72,78%.