Toraze y Johnnie Mae Davis habían decidido casarse luego de estar varios años de novios y el emocionante momento llegó el 19 de junio. Sin embargo, todo terminó en tragedia cuando el novio murió diez minutos después de dar el sí. La pareja, ambos de Nebraska, Estados Unidos, había elegido casarse el 19 de junio en honor a la festividad conocida como “Juneteenth”, en la que se conmemora la emancipación de la población afroestadounidense esclavizada, y -a la vez- para celebrar el cumpleaños de la abuela de ella. La ceremonia parecía ir por los carriles normales. Los invitados fueron llegando y estaba todo preparado para vivir una jornada emocionante. La pareja se paró frente al altar y, sacerdote mediante, se comprometieron para el resto de sus vidas. Hasta ese momento, todo era felicidad. Diez minutos después de haber dado el sí, Toraze -de 48 años- se empezó a sentir mal, se descompensó y tuvieron que llamar a una ambulancia. El hombre recibió atención en el lugar y luego fue trasladado a un hospital, donde finalmente falleció. Apenas unas horas después de la tragedia, el parte médico que brindó el centro de salud donde fue atendido el novio confirmó que el fallecimiento se debió a un coágulo de sanguíneo fulminante. Los coágulos de sangre en distintas partes del cuerpo pueden causar problemas como un accidente cerebrovascular isquémico, un ataque cardíaco, problemas en los riñones, insuficiencia renal y problemas durante el embarazo. Jewel Roberson, amiga de la viuda, contó cómo vivió el trágico momento en el que todo pasó de ser felicidad pura a una tristeza infernal: “Se casó y enviudó en un lapso de 10 minutos. Estábamos en la iglesia y había sido una ceremonia hermosa”. Ahora, los amigos de la pareja iniciaron una recaudación de fondos en GoFundMe para ayudar a cubrir los gastos funerarios y cuidado de los hijos. Miller, encargada de la colecta que se realiza a través de redes sociales, señaló: “Pasó de planear una boda a planear ahora un funeral. El día más feliz de sus vidas se convirtió en un día trágico”. “Realmente queremos enfatizar que queremos poder cuidarla y permitirle el matrimonio y nutrir a sus hijos y a nosotros mismos”, dijo Miller.