La guerra entre Israel y Palestina es un hecho que estremece al mundo entero, miles de inocentes fueron asesinados como consecuencia de una situación historica. En ese marco Dame Noticias tuvo el placer de charlar con Santiago Vera García, analista internacional y miembro del Núcleo de Estudios de Medio Oriente de la Universidad Austral, quien dió su opinón profesional sobre el origen de este hecho actual. En principio Vera comentó que, "para entender el conflicto en curso entre Hamas e Israel, es crucial retomarnos a, por lo menos, 120 años atrás. Si no logramos entender lo que sucedía en la región a fines del siglo XIX y principios del siglo XX, el análisis que hagamos del conflicto actual quedaría en el vacío". Además explicó que, "según datos que han sido recabados de los archivos del Imperio otomano, la población hebrea en la zona de lo que hoy conocemos como Israel y los territorios palestinos era de alrededor del 4% hacia finales del siglo XIX. Sin embargo, desde 1882 en adelante, el Sionismo, un movimiento nacionalista del pueblo judío que pretendía la creación de un “Estado Judío”, comenzó a fomentar la migración de este pueblo judío, principalmente desde Europa, hacia lo que para los judíos es la 'Tierra Prometida' ". Asimismo Santiago destacó, "Uno de los históricos escritos acerca del destino del pueblo judío reza: “Una tierra sin pueblo, para un pueblo sin tierra”. Sin embargo, esa “tierra” ya tenía “un pueblo”, y ese pueblo eran los árabes". "Durante la Primera Guerra Mundial, el Reino Unido va a llevar a cabo tres maniobras diplomáticas con respecto al territorio del Imperio otomano. En 1916, Francia y el Reino Unido, a instancias de Mark Sykes y François Georges-Picot, van a firmar un acuerdo secreto, conocido como Acuerdo Sykes-Picot, en el cual acordaron dividirse las partes árabes de Medio Oriente una vez finalizada la guerra", señaló. Y continuó, "en segundo lugar, el embajador del Reino Unido en Egipto, Henry McMahon, intercambió correspondencia con el emir de la Meca, Hussein ibn Ali, en 1915, con el objetivo de que los árabes se revelaran contra los otomanos, y de esta manera evitar el envío de tropas de Los Aliados hacia el sur del Imperio. A cambio, la casa de los hachemitas exigía la creación de una especie de estado pan-árabe en toda la región de la península arábiga. Una especie de 'Arabia para los árabes' ". "En tercer lugar, en 2017, con el afán de proteger a una minoría étnica en la región de Medio Oriente (Francia ya protegía a los católicos y Rusia hacía lo propio con los ortodoxos), se emitió la Declaración Balfour. En ella, el ministro de Asuntos Exteriores británico le expresa al líder de la organización sionista en Inglaterra, Lord Rothschild, que “Su Majestad Británica […] ve con buenos ojos […] el establecimiento en Palestina de un hogar nacional para el pueblo judío”. Cabe recordar que los británicos pensaron que, si expresaban su apoyo a los judíos, Estados Unidos y Rusia otorgarían más apoyo al esfuerzo de los Aliados en la Gran Guerra", describió. Y agregó, "acabada la contienda, el Reino Unido decidió apegarse al Acuerdo Sykes-Picot y, bajo la figura jurídica del “Mandato”, patrocinada por la recientemente creada Sociedad de Naciones, dominó sobre la región de Palestina". Además Santiago dijo que, "a partir de entonces, la migración judía hacia la región comenzó a crecer exponencialmente. A su vez, hubo un auge nacionalista en ambos bandos, con la creación de la Agencia Judía y del Alto Consejo Árabe. Y, desde 1922 en adelante, los conflictos y choques entre judíos y árabes comenzaron a ser cada vez más frecuentes". El analista también comentó, "Saltando al final de la Segunda Guerra Mundial, con un Reino Unido devastado por el conflicto bélico que acababa de tener lugar, la violencia entre árabes y judíos en la región de Palestina llega a su punto más alto. En este sentido, en conjunto con Estados Unidos, el Reino Unido propone dos planes de solución, conocidos como Plan Morrison y Plan Bevin. Sin embargo, al ver que estos no prosperaron, el Reino Unido se retiró del territorio y delegó al solución a las Naciones Unidas". De esta manera se refirió a lo que se trataba,"así, este nuevo organismo internacional propuso un Plan de Partición basado en la “solución de los dos Estados”. El mismo, que otorgaba, aproximadamente, el 55% del territorio a Israel (a pesar de que había menor cantidad de judíos que de árabes), el 43% a Palestina y declaraba a Jerusalén como “ciudad internacional” (el restante 2%), fue aceptado por los judíos, pero no por los árabes. Finalmente, el 14 de mayo de 1948, el Estado de Israel declara su independencia, y los Estados árabes circundantes (Siria, Jordania, El Líbano y Egipto), le declaran la guerra al día siguiente". Y señaló, "lo que para los judíos es un día de gloria, para los palestinos es Al Nakba (“La Catástrofe”), puesto que la victoria de Israel en esta primera guerra árabe-israelí generó el desplazamiento de más de 700.000 palestinos de sus hogares". Además indicó, "Tras una segunda guerra árabe israelí, relacionada directamente con la nacionalización del Canal de Suez por parte de Egipto en 1956, ocurrió una tercera guerra árabe israelí en 1967. En este caso, se trató de una guerra preventiva lanzada por Israel, debido a que todo parecía indicar que el Egipto de Gamal Abdel Nasser se estaba preparando para la guerra. En una veloz guerra de seis días, Israel logró conquistar los Altos del Golán de manos Siria, Cisjordania de manos de Jordania, y la Franja de Gaza y la Península del Sinaí de manos Egipto. Además, a los 700.000 palestinos desplazados en 1948 se sumaron otros 300.000". "Finalmente, la cuarta guerra árabe israelí supuso un ataque sorpresa en el día de la celebración judía de Yom Kippur, en 1973, por parte de la coalición de Estados árabes, no incluido El Líbano. Si bien Egipto, Siria y Jordania logran rápidos avances, Israel los detuvo y logró avanzar nuevamente sobre territorio de los países agresores", agregó. Sobre lo que sucediò luego de este sorpresivo ataque dijo que, "tras esta contienda, Egipto va a reconocer y firmar la paz con el Estado de Israel en 1978 (el Acuerdo de Camp David). El mismo estuvo sustentado bajo el principio “Paz por Territorios”. Y agregó, "15 años más tarde, en medio de una oleada de paz entre palestinos e israelíes, la Organización para la Liberación Palestina (OLP), una organización paraguas de distintas organizaciones palestinas que había sido creada en 1964, firmó con Israel los Acuerdos de Oslo en 1993, que promulgaban la solución de los dos Estados bajo el principio de “Paz por Territorios". En los mismos, Israel reconoció a la OLP como interlocutora válida de los palestinos y se comprometió a entregarle progresivamente territorios a los palestinos, y la OLP reconoció el derecho del Estado de Israel a existir, renunciando a la violencia. También, nació la Autoridad Nacional Palestina, que actualmente gobierna en Cisjordania". Para finalizar con el analisis historico sobre este conflico, Santiago destacó que, "sin embargo, el asesinato de Yitzhak Rabin, primer ministro de Israel, en 1995, y la posterior radicalización de Yasser Arafat, líder de la OLP, dinamitaron los Acuerdos de Oslo, y con ello la paz". Y señaló, "en 2005, Israel se retiró unilateralmente de la Franja de Gaza. Al año siguiente, Hamas, un grupo islamista considerado como terrorista en los países occidentales que en su carta constitutiva incluyó expresamente la “destrucción del Estado de Israel” como uno de sus objetivos, ganó las elecciones legislativas en Gaza". Además dijo que, "no obstante, tras la negativa de Fatah, la facción principal de la OLP, a entregarles el poder, se desató un conflicto interno en Gaza que acabó con la expulsión de Fatah de la región y con Hamas gobernando desde 2007. En este contexto, Israel impuso un bloqueo sobre la Franja, el cual continúa a día de hoy". Y se refirió a lo que este enfrentamiento signiffica, "luego de sucesivos conflictos entre Israel y Hamas en la Franja de Gaza, fundamentalmente en 2012, 2014 y 2021, estamos presenciando, desde el pasado 7 de octubre, el peor conflicto armado de los últimos 50 años entre ambas partes". "Mientras tanto, la Franja de Gaza, desconectada de Cisjordania, el otro territorio en el cual se encuentran los palestinos, se enfrenta a una situación humanitaria deplorable. Hasta antes de la guerra en curso, de una población total de 2,3 millones de personas, alrededor del 75% era refugiada, el 98% del agua que sale de las canillas no era potable, el desempleo alcanzaba el 40% y solo había entre 2 y 3 horas de luz eléctrica por día" destacó. Vera destacó que, "sin lugar a dudas, quienes más están sufriendo esta escalada de violencia son tanto los civiles en la Franja de Gaza como los civiles israelíes que fueron injusta y violentamente asesinados, torturados y/o secuestrados por Hamas. Es en ellos en quien debemos pensar a la hora de buscar soluciones al conflicto". Por último el analista sanjuanino indicó que, "cabe resaltar, que Hamas no puede ser considerado como una organización representativa del pueblo palestino. Ellos tienen sus propios objetivos y los persiguen mediante sus propios medios".