Hay conmoción por la brutal decisión que tomó un hincha de Boca tras la derrota en el Maracaná. Tenía 23 años y era policía, pero el resultado del club de sus amores fue determinante para que se quitara la vida, de acuerdo a lo que relató su mamá en una entrevista con Crónica. El joven vivía en Claypole y arremetió contra su vida tras la final de la Copa Libertadores. Allí, el Fluminense le ganó a Boca el encuentro que disputaron. Su mamá habló y comentó que él era fanático del club y le dolía mucho cuando perdía. El hincha se llamaba Marcelo Morales. Era policía, aunque estaba de licencia médica tras haber contraído coronavirus. Antes de morir, le dejó todos sus ahorros a su hermano. Verónica, su mamá, explicó que el joven "tenía una vida normal, no era un chico malo, no consumía nada. Él iba de su trabajo a su casa. Nunca lo iban a ver en la esquina con nadie, saludaba respetuosamente a todos". "Era fanático de Boca. Si perdía, estaba mal, se ponía triste, pegaba piñas, decía que era lo más grande Boca. Me lo mataron.Yo ahora no lo tengo y no hay ningún jugador que me dé el pésame", contó. "Hace tres semanas le dijo al padre que no me cuente nada a mí, pero le dijo ‘si el 4 de noviembre no gana Boca, yo me mato’. El papá pensó que estaba haciendo una joda, no lo tomó en serio", cerró la mamá.