A través de una ceremonia muy emotiva, el icónico actor de Mi pobre angelito, Macaulay Culkin, recibió su estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood, un reconocimiento sumamente importante para la carrera de cada artista. La ceremonia tuvo lugar en Hollywood Boulevard y contó con la participación de colegas de la industria y amigos cercanos, los cuales dieron el presente para honrar al artista en momento tan importante en su carrera. Dentro de los varios momentos emocionantes del evento, hubo uno que enterneció por completo al público: el momento en el que se reencontró con Catherine O’Hara, su “madre” de Mi pobre angelito. Fue antes de que el actor diera el discurso de agradecimiento, una de sus colegas tomó la palabra donde dijo que aquella película “es y siempre será una adorada sensación global… La razón por la que familias de todo el mundo no pueden dejar pasar un año sin verla y amarla es por Macaulay Culkin”. “Macaulay, felicidades. Merecés una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood. Gracias por incluirme a mí, tu mamá falsa que te dejó no solamente una vez, sino dos, en este momento tan feliz”, agregó. Otra de las intérpretes que dio unas palabras fue Natasha Lyonne, quien le agradeció en el apoyo que le dio en su carrera como directora y añadió que, “la verdadera belleza es ver el adulto en el que te convertiste, el padre que sos y ver a tus hermosos hijos”. Finalmente, Culkin coronó el día con un emotivo discurso para su esposa, la exestrella de Disney Brenda Song, a quien le dio las gracias por el acompañamiento que le brindó a lo largo de este tiempo. “No solamente sos la mejor mujer que conocí, sos la mejor persona que conocí. Me diste todo mi propósito, me diste una familia y después del nacimiento de nuestros dos hijos, te convertiste en una de mis tres personas favoritas”, manifestó. Finalmente, cerró su discurso con una frase emblemática de Mi pobre angelito: “Para terminar, en el espíritu de las fiestas. Solo quiero decir: Feliz Navidad, animales asquerosos”.