Gonzalo Rafael Martínez tenía 19 años y estaba detenido en la cárcel de Coronda desde hace poco tiempo. Si bien en un primer momento afirmaron que se electrocutó luego de que un ventilador cayó al piso, se confirmó que el accidente ocurrió con un calentador “casero” que Martínez intentó mover de lugar mientras limpiaba el piso de la celda.   La víctima estaba detenida en el Pabellón 2, celda 256 del Instituto Correccional Modelo U1 Dr. César Tabares. Las autoridades del lugar confirmaron que sucedió momentos antes del control diario de la Guardia Operativa de la Restitución del Orden (GORO), y que por ello el lugar estaba siendo limpiado por los reclusos.     Al ver la situación, dos presos intentaron auxiliarlo pero ya era tarde. Tras los peritajes criminalísticos, realizados por los agentes del área Científica de la Agencia de Investigación Criminal AIC, se conoció que la fiscalía ordenó la realización de la autopsia en la morgue judicial.