En julio del año pasado Cacho Garay fue trasladado a una cárcel común tras la decisión del juez Federico Martínez de revocarle la prisión domiciliaria. El humorista está acusado por el delito de amenazas agravadas, tenencia ilegal de arma de fuego de uso civil, abuso sexual con acceso carnal, privación de la libertad agravada y desobediencia a una orden judicial. Durante las últimas semanas, trascendió que el artista se encontraba atravesando una dramática situación de salud, razón por la que había adelgazado más de 20 kilos. Ahora, en DDM (América) mostraron una fotografía de Garay en su celda en la cárcel de San Felipe y su apariencia llamó la atención de todos en el piso. Según detalló Martín Candalaft, Garay está detenido en el pabellón 1A que tiene capacidad para 80 personas y en su interior hay 160 reclusos: “Evidentemente es cierto que bajó de peso, porque se lo ve más delgado, pero también se ven las condiciones en las que vive él y sus compañeros de celda”. En la celda hay tres camas y seis personas. Se turnan para dormir en el piso”. En cuanto a la salud de Garay, Mariano Yezze sumó: “El viernes, su abogado presentó un recurso ante la Corte Suprema de Mendoza para volver a la domiciliaria alegando que Cacho tiene cáncer de próstata, diabetes, problemas cardiológicos, neurológicos, motrices, y que perdió un 80% de la visión. Él quiere que sea evaluado por un oncólogo, un urólogo, cardiólogo, neurólogo y un traumatólogo”. “Cacho hace charlas motivacionales con los jóvenes porque nota que en ese pabellón, uno de los más picantes de la cárcel, hay muchos suicidios. Y él trata de mostrarles su historia de vida”, reveló sobre la actualidad del cómico.