El exintendente de Caucete, Julián Gil, recibió este viernes 23 de agosto una condena por encubrimiento en dos casos de abuso sexual. La sentencia dictada estipula que Gil no enfrentará una pena de prisión efectiva. El tribunal concluyó que Gil, en su papel de abogado, intervino en ambos casos con el objetivo de proteger a un acusado de abuso sexual, lo que resultó en su condena por encubrimiento. En uno de los casos, el abogado logró el sobreseimiento de su cliente después de pagar $6.000 de su propio bolsillo y obtener una suma adicional mediante pagarés que hizo firmar al sospechoso en la cárcel de Chimbas. Con este dinero, se logró que la víctima, quien estaba en una situación económica vulnerable según la investigación, se contradijera y alegara que la denuncia había sido motivada por celos, ya que el acusado estaba saliendo con otra mujer. Una grabación de una joven de 16 años, en la que se puede escuchar a Gil tratando de convencerla para que desistiera de acusar a su cuñado, se convirtió en una prueba clave en su contra. En la grabación, Gil menciona el caso en el que logró el sobreseimiento a cambio de dinero y sugiere que esta no era la primera vez que actuaba de esa manera, según fuentes judiciales. La jueza Gloria Chicón aprobó el acuerdo de juicio abreviado entre la defensa de Gil, representada por Mario Morán, y la fiscalía, liderada por Francisco Micheltorena, dictando una pena de un año de prisión condicional.