El pediatra Carlos Cabrera ha sido sentenciado a tres años de prisión condicional y a cinco años de inhabilitación para ejercer la medicina, debido a su responsabilidad en la muerte de una bebé por mala praxis. El juez Guillermo Adárvez dictó la sentencia, calificando el caso como homicidio culposo, que se refiere a un homicidio sin intención directa pero causado por negligencia o incompetencia profesional. La condena se fundamenta en el tratamiento inadecuado que Cabrera proporcionó a la bebé, de apellido Salinas, el 29 de julio de 2022. Esa madrugada, la bebé fue ingresada en la guardia pediátrica del Hospital Rawson con síntomas que sugerían neumonía. Después de realizarle las pruebas pertinentes, el pediatra prescribió Amoxidal 500 y decidió darle el alta, indicando a los padres que podían llevar a su hija a casa. Sin embargo, al día siguiente, la bebé falleció. El fiscal Iván Grassi, coordinador de la UFI Delitos Especiales, había solicitado una inhabilitación de diez años para Cabrera, dada la gravedad del caso. La investigación judicial determinó que la bebé no debía haber sido dada de alta en el estado en que se encontraba, y la sentencia refleja la responsabilidad del médico en este trágico suceso.