Miriam Beatriz Seronello, una de las víctimas del “Loco del Sifón”, murió trágicamente este fin de semana al atragantarse con comida en su casa de Rawson.   De acuerdo a lo trascendido, la mujer no vidente tenía su salud muy debilitada, con trastornos psiquiátricos y  otras patologías por lo que estaba al cuidado de una enfermera. Todo ocurrió en su casa del barrio Sarmiento mientras comía una banana, se ahogó y asfixió. Cuando su cuidadora notó lo ocurrido pidió asistencia, pero los médicos del 107 nada pudieron hacer.   Emblemático caso Eduardo Adán Villavicencio, de 45 años,  está preso desde los 17. Se lo conoce como “El Loco del Sifón”. , sumó en  una nueva condena en 2021 por la violación de otro  interno del Penal de Chimbas.   El historial criminal de “El Loco del Sifón” Su hoja de crímenes comenzó en 1997 cuando sorprendió a una pareja que tenía sexo en las cercanías de un boliche, golpeó al hombre con un escombro hasta desmayarlo y violó a la chica. En ese momento, era menor de edad, por lo que fue enviado a un pabellón de menores de la prisión, donde pasó encerrado un año y medio. Fue liberado por buena conducta. “Soy un violador serial, maté a dos personas. Yo, sano no hacía nada, pero drogado me perdía”, dio una entrevista a un medio sanjuanino 10 años después de ser condenado a perpetua. “Creo que lo del sifón fue por algo que me quedó de mis viejos, ellos se tiraban con el sifón. Yo quería matarlos”, confesó con frialdad. La vida de “El Loco del Sifón” en la cárcel: se casó y tuvo hijos En la cárcel, “El Loco del Sifón” terminó el secundario, se casó, tuvo hijos y está por ser abuelo. Además, se hizo devoto de la Iglesia Evangélica y comenzó trabajar en el taller de la prisión. Todos estos aspectos de su vida tras las rejas, puso de relieve durante su declaración ante el juez al negar su participación en la violación en grupo.