En octubre, una familia de cuatro personas en el conurbano bonaerense necesitó ingresos por casi $1 millón para no quedar debajo de la línea de pobreza, mientras que los gastos básicos de alimentación llegaron a más de $430.000. Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), la Canasta Básica Total (CBT), que marca el umbral de pobreza, mostró un aumento mensual de 2,6% en octubre, el menor registro desde noviembre de 2021. Este aumento llevó a que una familia tipo del Gran Buenos Aires necesitara $986.586 para cubrir todos los bienes y servicios necesarios y mantenerse por encima de la línea de pobreza. En términos de indigencia, una familia necesitó $434.620 para cubrir solo las necesidades alimentarias básicas. La Canasta Básica Total sufrió un aumento interanual del 185,7%, reflejando el impacto de la inflación en los hogares. Este indicador es clave para evaluar el poder adquisitivo de la población y su capacidad para afrontar los costos básicos de vida. Para un hogar de cuatro personas, por ejemplo, la CBT para el mes de octubre ascendió a $986.586, mientras que para una familia de cinco miembros fue de $1.037.672. Por otro lado, la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que solo mide los costos de alimentos, mostró un incremento más moderado de 1,4% en octubre, aunque con una suba anual acumulada de 222,7%. Impacto de la inflación La inflación de octubre se desaceleró, ubicándose en 2,7% mensual, frente al 3,5% registrado en septiembre. A pesar de este alivio temporal, la inflación interanual continúa siendo alta, alcanzando 193%. El aumento de los precios sigue siendo impulsado principalmente por los alimentos y bebidas, con una suba del 3,6% en octubre, lo que refleja tanto los costos internos como los factores internacionales que afectan a las materias primas. Los informes también destacan el aumento en los alquileres y servicios públicos, con una suba del 7% en el rubro de vivienda, agua, electricidad y otros combustibles. Esto se debe, en gran parte, a los incrementos en los alquileres y el aumento de las tarifas de electricidad, gas y agua. Educación y transporte también experimentaron incrementos considerables, con un aumento de 6,6% y 5,1%, respectivamente, debido al alza en los costos de enseñanza y transporte público. Perspectivas para los próximos meses El gobierno continúa apostando a la desaceleración de la inflación en los próximos meses. Sin embargo, las proyecciones más conservadoras apuntan a que la inflación mensual podría mantenerse alrededor del 3,5% al 4%, lo que dificulta una caída rápida en los precios. A pesar de las dificultades, se espera que el índice de precios al consumidor (IPC) anual cierre el año con una variación cercana al 130%, según el presupuesto preliminar que será presentado en el Congreso.