A poco más de un mes de la vuelta con Atlético Mineiro por las semifinales de la Copa Libertadores, en la que no pasó del 0-0 y quedó eliminado, River recibió oficialmente la sanción de Conmebol que ya se preveía por el recibimiento plagado de pirotecnia que llevó a la práctica en la previa del partido. ¿Qué castigo le aplicó la Confederación Sudamericana de Fútbol? En primer lugar, desde el punto de vista deportivo, le prohíbe al club de Núñez llevar público al próximo partido que afronte por el máximo certamen continental. Es decir, deberá jugar un cotejo a puertas cerradas. En segundo orden, la sanción afecta a River desde el lado económico, una accionar habitual de parte de Conmebol cuando los clubes incumplen las normas y además utilizan bengalas, fuegos artificiales y cualquier tipo de artefactos que no están permitidos. En concreto,Jorge Brito y la dirigencia riverplatense deberán abonar 100.000 dólares de multa por la pirotecnia, 50.000 por actos racistas y otros 55.000 extras por diferentes incumplimientos al reglamento de la Copa Liberadores. Es decir, un total de U$D 205.000. Por lo pronto, disconformes con la categórica medida tomada por el ente, desde River ya dieron a conocer que no se quedarán de brazos cruzados y apelarán la sanción con el objetivo de intentar reducirla. Hay que recordar que esta no fue la única represalia que tuvo River por el recibimiento ante Mineiro: por el uso de pirotecnia en todo el estadio, días después del acontecimiento el Monumental había sido clausurado administrativamente por la Agencia Gubernamental de Control del país. En ese entonces, River también debió pagar una multa y tramitar ante un controlador de faltas de la Dirección General de Administración de Infracciones de la Ciudad el levantamiento de la medida, lo que rápidamente fue concedido.