La intensa investigación del caso de la policía que recibió un disparo en su mandíbula se encuentra a punto de finalizar y de que pueda aclararse todo lo que pasó. Mientras tanto, este viernes 7 de marzo, la Justicia liberó a los únicos dos detenidos del caso. Siendo la ex pareja y ex cuñada de la mujer. Todo parece indicar que la policía de San Martín, que se encuentra bastante grave, se autoagredió, según la teoría del caso. El fiscal de Cavig, Eduardo Martínez, pidió la libertad este viernes 7 frente a la jueza Mónica Lucero, en lo que fue la audiencia de control de detención. Luego de hablar con dos testigos importantes, está 99% convencido de que no se trató de un intento de femicidio u homicidio. Las personas que viven en frente de la vivienda pudieron observar que el detenido y su hermana ya no estaban en la casa, cuando escucharon el disparo. Así se lo confirmaron al fiscal del caso. Parece ser, que hace unos cinco días, la pareja cortó y el joven fue con su hermana para hablar o buscar unas cosas en la casa de la uniformada. Después de esto, se produjo el disparo con el arma reglamentaria que dio en la mandíbula de la sanmartiniana y sospechó en principio que se trataba de un caso de intento de femicidio, pero con la instrucción de las primeras pruebas, el fiscal está cada vez  más convencido que de que se trató de un intento de suicidio por varios motivos. Primero, la bala ingresó por la mandíbula de la mujer de unos 30 años, salió por la nariz y pegó en el techo. El disparo lo ejecutó la agente con su mano izquierda, ya que encontraron restos de pólvora en este miembro y el casquillo del proyectil entre sus ropas. Por otra parte, el fiscal declaró que ni el hombre ni la hermana tenían restos de pólvora ni de sangre entre sus prendas de vestir. El sospechoso masculino sí tiene plomo en sus manos, pero se cree que es por su trabajo en el cementerio municipal. Actualmente, la oficial de Policía sigue internada en terapia intensiva en el Hospital Privado.