En una tarde a pura emoción, abrazos y muchas lágrimas, la panadería Santa Josefina, un local que atenderán exclusivamente personas con discapacidad, inauguró sus puertas este viernes 21 de marzo. La fecha elegida no fue casualidad, ya que surgió debido a que fue en conmemoración por el Día Mundial de las Personas con Discapacidad. Santiago Mira, Santiago Molina, Santiago Aguilera, Martín Massi, Juan Diego Tejada y José Eduardo Tejada, son los seis jóvenes emprendedores que darán vida a este proyecto tan esperado por ellos. En el corte de cinta en la calle Catamarca, cerca de la avenida Córdoba, estuvieron presentes sus familiares y amigos para dar la bienvenida a una nueva oportunidad laboral e inclusiva para ellos. María Celia Más, mamá de unos de los chicos y presidente de la Corporativa de Trabajo Santa Josefina, explicó la necesidad de crear más espacios como este ejerciendo la inclusión. "Luego de que nuestros hijos terminen la secundaria, la inclusión laboral se vuelve muy limitada. Este proyecto es una oportunidad para ellos y para que otros puedan tener experiencia y quizás insertarse en el ámbito laboral", manifestó. El gobernador de San Juan, Marcelo Orrego, estuvo presente en el evento para respaldar este tipo de proyectos que promueven más la inclusión. "Tenemos que avalar y apoyar para que haya más planes de entrenamiento. Queremos generar un circuito virtuoso que es aprender, trabajar y producir para darle dignidad a cada persona. Esperamos que con esta panadería, podamos romper esas barreras y generar una ventana de oportunidad para todos", expresó Orrego, destacando cuan impotante son estas iniciativas. Además de la presencia del gobernador estuvieron presentes el ministro de Familia y Desarrollo Humano, Carlos Platero, la directora de Discapacidad, Paula Moreno, y demás autoridades. El evento también contó con la participación del padre José Juan y el arzobispo de San Juan de Cuyo, Monseñor Jorge Lozano, quien resaltó el arduo trabajo de la Comisión de Justicia de Paz del Arzobispado para lograr el proyecto. La inauguración de esta panadería representa un gran desafío para los chicos, pero también una oportunidad de crecimiento personal. Además, inspiran a otras personas y al comienzo de un cambio en San Juan para que se abran aún más puertas y oportunidades para todas las personas con discapacidad que deseen insertarse en el mundo laboral.