“Salí en el auto y revisé todos los sanjones, los sifones y llegué hasta compuertas que ni siquiera conocía, pero no encontré a mi hermano”, relató Raúl Gómez, visiblemente angustiado, casi un día después de la desaparición de su hermano Matías. La desesperación de la familia Gómez comenzó pasada la madrugada del jueves, alrededor de las 3, cuando Matías Elio Gómez cayó al caudaloso canal Céspedes. Raúl explicó que Matías cayó en la zona de Calle 16 y que, al ser arrastrado por la corriente, comenzó a pedir ayuda a gritos. “Vecinos de Alfonso XIII y Calle 17 escucharon sus pedidos de auxilio, aunque esa zona está bastante lejos del lugar donde cayó. Lamentablemente, quienes lo oyeron no pudieron hacer nada para salvarlo”, contó Raúl con la voz quebrada. Consultado sobre cómo vestía Matías al momento de desaparecer, Raúl dijo que llevaba puesta la ropa que se ve en la foto que acompaña esta nota. “Le saqué esa foto poco antes de que desapareciera. En la orilla del canal encontraron una gorra negra que era suya y la remera blanca, por lo que desapareció con el pantalón y las zapatillas puestas”, recordó. Raúl advirtió que, al momento de la entrevista, ya estaba anocheciendo, lo que le genera aún más angustia y temor por no haber encontrado a su hermano. “Le pido a la policía que nos ayude, que traigan perros y recorran toda la zona, estamos desesperados”, concluyó.