Si hay algo que es increíble dentro de la docencia es que los maestros aprenden más de los alumnos que de los conocimientos adquiridos durante sus años de profesión. El día a día hace que cada maestro incorpore los valores y el cariño que cada chico brinda. Este contexto es muy visto en las escuelas alejadas al Gran San Juan, donde los estudiantes tienen realidades muy diferentes al chico de ciudad. Para destacar la labor en su día, DAME NOTICIAS dialogó con la docente María Marta Barroso. La maestra de la Escuela de Educación Especial Crucero ARA General Belgrano, institución ubicada en el departamento San Martín contó sobre la vida cotidiana del alumno que vive en zona rural y el gran recibimiento que les llega a cada profesional de esa entidad. ¿Cómo llegó a elegir la enseñanza como trabajo? “Si bien, siempre tuve contacto con la docencia por mi familia, no fue lo primero que elegí como profesión. Yo estaba estudiando la carrera de Contador Público, pero no estaba contenta. En un momento, una profesora me aconsejó y me dijo que siga lo que me haga feliz sin importar el dinero, porque en un futuro te dará mucha felicidad. Luego, decidí estudiar educación especial y, con el paso del tiempo, me dí cuenta que es una profesión hermosa”. Lo que destaca su trabajo en educación especial es el hecho de pertenecer a una institución alejada del Gran San Juan. ¿Qué encuentra de especial en este tipo de entidades? “El niño que vive en una zona alejada se sorprende por todo. Al no tener un contacto diario con la tecnología y el comercio,  me doy cuenta de su inocencia como también de sus cariños, su recibimiento. Ellos necesitan estar constantemente con el docente porque son chicos que se conforman con tan poco y a la vez, son muy agradecidos y muy necesitados”. En sus años de docencia. ¿Qué trabajo destaca con los alumnos? “Fue una experiencia en la Feria de Ciencias. Donde los chicos se comprometieron totalmente con el proyecto basado en el cuidado de los dientes. Fue el mejor trabajo presentado en la zona, donde luego les tocó exponerlo en un evento provincial y quedamos en segundo lugar. Dejando de lado cualquier resultado, me quedé totalmente sorprendida con todo lo desempeñado, porque los participantes del proyecto se cargaron una responsabilidad enorme que luego dio sus frutos. También podría  nombrar las competencias en Juegos Evitas, donde la escuela tiene grandes competidores”.  ¿Qué se debe tener para ejercer el cargo de docente? “Paciencia y cariño. Además del trabajo didáctico, los niños necesitan del amor y la contención que la escuela les debe dar. Hay cosas como capacitaciones o cursos que uno va aprendiendo con las capacidades y experiencias, pero el docente siempre debe estar presente con el alumno. Más que nada en lo momentos difíciles, porque ellos vienen de contextos bastante complicados, y no hay mejor institución que la escuela para apoyarlos y brindarles no solamente una buena educación, sino un bienestar”.