El Gobierno argentino no permitió el ingreso de dos delegados de ONG que estaban acreditados para participar a partir del domingo de la Conferencia Ministerial de la Organización Mundial de Comercio (OMC), en Buenos Aires. Se trata de Petter Titland, el presidente de la ONG noruega Attac Norge, y la periodista británica Sally Burch, de la Agencia Latinoamericana de Información. Petter Titland fue demorado al llegar al aeropuerto internacional de Ezeiza y luego deportado a su país vía Brasil. "Esto es una prueba de la deficiencia de la democracia en Argentina, que está amenazada", denunció Titland a Radio 10. Además, dijo que las autoridades argentinas le aseguraron que no podía ingresar al país porque la organización que representa había participado de manifestaciones violentas realizadas en la ciudad de Hamburgo durante la Cumbre de Jefes de Estado del G20 en Alemania. La periodista británica Sally Burch también contó su situación en declaraciones radiales: "Cuando llegué a Migraciones dije que entraba como turista y aparecí en una lista (en la que decía) que no podía entrar. Ahora me dicen que me ponen en un vuelo de regreso a Ecuador". La mujer presentó un recurso legal para anular el impedimento de ingreso, pero no llegó a tiempo, ya había sido enviada de regreso. De las 241 ONG que fueron acreditadas por la OMC para asistir a la reunión ministerial, 19 fueron rechazadas, según confirmó el vocero del organismo. Ante las protestas, el gobierno revisó la medida y aceptó la acreditación de algunos de los representantes de las asociaciones cuestionadas.