Este viernes se produjo un nuevo e inesperado giro en la causa de los exjugadores de Vélez acusados por abuso sexual con acceso carnal agravado a una periodista tucumana. La Justicia provincial determinó liberar a Abiel Osorio, Braian Cufré y José Florentín, quienes permanecían con prisión domiciliaria cerca del lugar de los hechos. Ahora, los procesados podrán residir en Buenos Aires a la espera del juicio. Al mismo tiempo, le prohibieron dejar el país al uruguayo Sebastián Sosa, quien había quedado en libertad luego de abonar la caución impuesta al ser señalado como partícipe secundario no podrá cruzar el charco y volver a jugar en el fútbol charrúa como planificaba. Osorio, Cufré y Florentín abandonarán la prisión domiciliaria que transitaban desde el 21 de marzo en un country cercano a San Miguel de Tucumán, tras avanzar la denuncia de una periodista de 25 años que dijo ser abusada sexualmente por ellos tres durante la concentración de Vélez en un hotel, el pasado 2 de marzo, tras un partido entre el Fortín y Atlético Tucumán. A posteriori, el club rescindió los contratos de los cuatro implicados. Que los jugadores hayan recibido la habilitación para regresar a sus respectivos hogares en Buenos Aires fue posible después de que la fiscalía consintiera las medidas alternativas de coercion a la prisión domiciliaria ofrecidas por las defensas, que fueron aceptadas también por el juez Sebastián Mardiza. ¿Qué significa esto? Que no se opuso, con lo cual no hay apelación posible (el caso no tiene que ir a Cámara de Casación). Una postura totalmente diferente a la de la querella, pero que por una cuestión del Código Procesal Penal no tiene validez. Mardiza no considera que Osorio, Cufré y Florentín puedan entorpecer la investigación o que exista algún riesgo de fuga. Eso sí, ninguno podrá abandonar el país sin autorización judicial y, además, quedaron sujetos a acatar y cumplir las siguientes nueve medidas: Promesa de someterse al procedimiento. Fijar y mantener el domicilio. Prohibición de realizar cualquier acto que pueda obstaculizar el proceso. Obligación de permanecer a disposición del Tribunal y asistir a las citaciones, debiendo estar a disposición inmediata cuando la fiscalía lo requiera. Del 1 al 10 deberán presentarse en la fiscalía de Tucumán, debiendo la fiscalía labrar acta de comparendo. Y los lunes de cada semana, a la comisaria más cerca a sus domicilios y obtener constancia de residencia o trámite análogo. Retención de documentos de viaje. Disponer las prohibiciones de acercamiento respecto de la víctima y a su domicilio por un radio de 400 metros. Y cualquier acto de turbación, perturbación o intimidación por cualquier medio. No hacer lugar al pedido de autorización de Sosa Silva y en consecuencia prorrogar en contra de todos los imputados la prohibición de salir de la República Argentina por el término de 90 días. Libra oficio a la dirección nacional de migraciones y a Gendarmería Nacional Argentina, a policía aeroportuaria, a prefectura Federal Argentina y a policía Federal Argentina. Disponer que patronato de internos y liberados realice control aleatorio las veces y el horario que lo requiera necesario a los celulares de los mismos y que estos una vez constatada su identidad, procedan a enviar su ubicación actual. Debiendo realizar informe semanal que deberá ser remitido a la fiscalía actuante. Así las cosas, Osorio, Cufré y Florentín -que en su momento también habían pagado una caución de 50 millones de pesos cada uno- tienen la obligación de volver a Tucumán una vez por mes y presentarse ante el Tribunal para asegurar su comparecencia y cumplimiento de las medidas cautelares con la investigación, a diferencia de Sosa que debe hacerlo cada 15 días. Lo cierto es que la investigación seguirá su curso, pero con los futbolistas en libertad.