El Gobierno nacional confirmó que no se implementará el protocolo antipiquetes durante la movilización del 24 de marzo, en conmemoración del Día de la Memoria, Verdad y Justicia, que recuerda el golpe de Estado de 1976. Desde el Ministerio de Seguridad, destacaron que la marcha será pacífica, aclarando que no se tratará de un "piquete", sino de una manifestación tradicional, y aseguraron que la presencia policial será mínima. En este sentido, desde el entorno de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, enfatizaron: "Es un concepto completamente distinto al de piquete". Además, agregaron que se coordinarán con las fuerzas de seguridad porteñas para monitorear la marcha, que partirá desde la exESMA hasta la Plaza de Mayo. El operativo de seguridad estará bajo la supervisión de Bullrich, en conjunto con el ministro de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Giménez. Ambos destacaron tener una buena relación laboral, a diferencia de la que Patricia Bullrich mantenía con su predecesor, Waldo Wolff. Se espera que la movilización sea pacífica, las autoridades manifestaron que estarán muy atentas a la desconcentración, sobre todo en áreas como la Plaza de Mayo, la Casa Rosada y el Congreso, por si surgieran “infiltrados o grupos ajenos” que pudieran causar disturbios. El área que se verá más afectada por estas tareas de seguridad será el tránsito, pero el Gobierno destacó que, por el momento, no se espera que surja ningún inconveniente mayor, debido al carácter pacífico de las movilizaciones previas.