La audiencia por el caso de Lucía Rubiño, la joven que perdió la vida tras un siniestro vial, vivió un momento de máxima tensión cuando Belén Montilla, madre de la víctima, interrumpió con un reclamo cargado de dolor. Mientras la querella solicitaba que no se sobreseyera a Juan Pablo Echegaray, acusado por Homicidio Culposo, Montilla se levantó de su asiento y, señalando al imputado, le indicó al juez que “se estaba durmiendo” durante la audiencia. Visiblemente conmovida, la mujer pidió respeto y cuestionó la actitud del joven: “No se le ve ni la cara porque está durmiendo”, dijo, dejando en claro su malestar por lo que consideró una falta de consideración hacia el proceso judicial y hacia la memoria de su hija. Además, Montilla dirigió su descargo a la fiscalía y a la defensa, advirtiendo que no tolerará que se ponga en duda la conducta de Lucía al momento del hecho: “Mi hija estaba en la vereda, despidiendo a su novio, esperando que yo la buscara. No voy a permitir que se hable de ella de manera injusta”, afirmó con firmeza. La madre también recordó que muchas amigas de Lucía frecuentaban su casa y que como madre también de ellas, siente el deber de defender la imagen de su hija ante cualquier intento de relativizar lo ocurrido.